Las bodegas situadas en Valladolid, Tarragona y Zamora y enmarcadas en tres Denominaciones de Origen diferentes, ofrecen un viaje a los orígenes del vino y la tierra.

Rafael Cruz de Aguiar se incorpora a la Compañía como Director General.

Tres bodegas situadas en tres fincas y enmarcadas en tres Denominaciones de Origen diferentes: Ribera del Duero, Priotat y Toro. Muy diferentes entre ellas pero todas con un denominador común: un viaje a los orígenes del vino, fiel reflejo de la tierra, la pasión y el trabajo de regiones vitivinícolas históricas. Así es la Compañía de Viñedos Iberian, una empresa con 22 años de tradición y referente dentro del sector vitivinícola.

Viñas del Jaro D.O. Ribera del Duero

La empresa comenzó su andadura en 2001 con la búsqueda de una finca donde poder elaborar vinos tintos que expresaran y transmitieran las características de sus suelos. La encontraron a una altitud de entre 720 y 1.100 metros, dentro de lo que se llama la "Milla de Oro" de la Ribera en la localidad de Pesquera del Duero (Valladolid) con el nombre de "El Quiñón" y de 65 hectáreas. Allí nació la primera bodega del grupo, "Viñas del Jaro", adscrita a la D.O. Ribera del Duero.

Jaro es una bodega adaptada a la filosofía de la propiedad en cuanto a la calidad de los vinos y la finca de donde proceden. La vendimia es llevada a cabo a mano y la uva, además de ser seleccionada en el viñedo, es vendimiada por Pagos y Sectores dependiendo de su momento óptimo de maduración. La elaboración se realiza también por separado, diferenciando en todo momento las partidas de vinos provenientes de los diferentes Pagos y Sectores. La crianza en barrica se realiza en roble francés. Los vinos, separados según su procedencia, son catados con periodicidad para que, de esta manera, se determine con toda libertad la crianza, en función del estado sensorial de los mismos. Una vez finalizado el proceso de crianza, los vinos son seleccionados según su calidad para adscribirlos a su marca correspondiente, embotellarlos y llevarlos a la sala de botellero, donde culminará la crianza en botella. Conviven uva Merlot, Tempranillo, Cabernet Sauvignon y la variedad blanca autóctona Albillo Mayor.

De esta bodega obtenemos "Jaros", su vino de finca como les gusta llamarlo, que expresa el conjunto de particularidades de casi todos sus Pagos y Sectores, con una crianza mínima de 18 meses en barrica francesa. "Chafandín", procede de cepas viejas (50 años) del Pago con su mismo nombre y "Sed de Cana" que sólo ve la luz en determinadas añadas dentro del mismo Pago Chafandín, una pequeña área de sus viñedos de la parte más alta.

Bodegas y Viñedos de Cal Grau D.O.Q. Priorato

Poco tiempo después, "Bodegas y Viñedos del Cal Grau", en la D.O.Q. Priorat nace de la voluntad de desarrollar una pequeña bodega con finca propia en esta zona. Se encuentra en el término municipal del Molar (Tarragona), en una de las zonas más complejas orográficamente de Cataluña y tiene una extensión de 40 hectáreas, de la que 22 son viñedos. La orogenia abrupta, con suaves y moderados desniveles, la mineralidad de su suelo, el clima extremo y las zonas pobres, propicia un diseño de plantación particular.

La Filosofía de la Bodega se basa en un exhaustivo estudio de las uvas procedentes de sus partidas, que son elaboradas por separado en depósitos de pequeño tamaño para así relacionar los tipos de vinos con sus lugares de procedencia. Seguidamente, los diferentes tipos de vinos son llevados a la Cava de Crianza (situada bajo tierra) donde realizan la crianza en madera francesa por separado, hasta el momento del ensamblaje final. Este viene determinado por la cata de los mismos y su embotellado posterior bajo su marca correspondiente. Las variedades son principalmente la Garnacha y la Cariñena o Samsó, combinadas con otras de carácter más universal y de más reciente introducción en la zona, como el Cabernet, el Merlot o el Syrah.

Destacan "La Petite Agnès", con una crianza de cuatro meses en barrica y procede de sus viñedos más frutales de Garnacha y Cariñena; "Clos Badaceli" y "Clos Badaceli 100% garnacha", con una crianza de 14 meses en barrica nueva francesa conjuga la concentración de sus mejores viñedos y lleva por nombre el de la montaña que hay justo delante de la Bodega. Por último, "Les Ones", el vino de menor producción de la bodega, hace referencia a la forma que se vislumbra en sus viñedos con sus curvas y terrazas.

Viñedos de Yaso D.O. Toro

Por último, Iberian incorporó a su proyecto la Finca "Yaso", cercana a la localidad de Morales de Toro (Zamora). Hoy día, existe un acuerdo de alquiler de una bodega amiga de la zona donde el equipo técnico de Iberian realiza las vendimias de dicha finca. La Compañía cuenta con parcelas de viñedos muy viejos en los pueblos de El Pego y Valdefinjas de donde proceden sus vinos de más alta gama D.O. Toro, los denominados Matteria. La D.O. se sitúa en el marco de referencia de grandes vinos muy valorados internacionalmente por su fruta y fuerza aromática, además de su delicadeza sensorial. El clima es continental con ligera influencia atlántica y el contraste térmico es muy alto entre el día y la noche. El suelo de esta finca es pedregoso, en muchas zonas con superficie arenosa y pobre. El subsuelo arcilloso le permite retener la humedad y acumular cierta capacidad hídrica. Tras cada vendimia, que es realizada a mano y en su momento óptimo de maduración, las uvas son llevadas a depósitos de entre 3,000 y 15.000 kilos donde, dependiendo del año y las características de la cosecha, maceran en contacto con los hollejos entre 10 y 35 días. Tras la fermentación maloláctica, el vino es almacenado en barricas francesas donde permanecerá entre 4 y 28 meses hasta completar la fase de crianza, que siempre se decide tras las catas correspondientes.

Actualmente, la empresa cuenta con 21 trabajadores y tiene su sede principal en Madrid. La reciente adhesión a la Compañía de Rafael Cruz de Aguiar como Director General supone la incorporación de una pieza muy importante en el engranaje de Iberian de cara a alcanzar el objetivo fijado para este 2023: añadir valor a los vinos para ser un referente de calidad en todos los mercados, aumentar la productividad de todas las bodegas, depender sólo de su producción y hacer crecer la notoriedad de la marca en los mercados nacionales e internacionales.