La plataforma de servicios de energía solar Sunalizer propone cinco consejos para usar el ventilador y aire acondicionado sin aumentar de manera excesiva la factura eléctrica.
Se acerca la llegada del verano y las altas temperaturas. Una de las preocupaciones más comunes es mantener el hogar con un clima agradable sin que eso afecte en exceso a la factura de la luz. Ante este desafío, es fundamental conocer las opciones disponibles para combatir el calor y reducir el consumo de energía.
La plataforma de servicios de energía solar Sunalizer recoge en cinco puntos cómo utilizar el ventilador y el aire acondicionado de manera eficiente para no sufrir sorpresas en la factura de la luz.
Conocer el consumo de cada aparato.
El ventilador de techo tiene un consumo medio de 20 vatios; el tradicional ventilador de pie consume una media de 70W; y por último, el aire acondicionado incrementa su consumo hasta 1000W. Tomando como referencia un consumo de unas ocho horas continuas, el consumo del ventilador de techo sería de 0,0265 euros al día, el ventilador de pie asciende a 0,0895 euros y por último, el gasto del aire acondicionado ascendería a 1,28 euros por las ocho horas de consumo.
Adaptar el aparato eléctrico según la localización del hogar.
Si bien el ventilador de techo es la opción más económica para enfriar viviendas, el aire acondicionado suele ser la alternativa más atractiva en las zonas que necesitan una refrigeración más intensa, ya que, en lugares como Madrid, el Levante o el sur de España, el ventilador de techo es insuficiente y se requiere algo más de potencia.
Contemplar la eficacia del aire.
Los ventiladores de techo o pie tienden a mover el aire que circula dentro de un recinto. Si este aire es caliente, el resultado de la ventilación no será refrigerante. En estos casos, el aire acondicionado logrará disminuir la temperatura en menos tiempo y por más horas, lo que equipara el gasto con el de un ventilador convencional.
Adaptar las franjas horarias para cada ventilador según su consumo.
El ventilador de techo, debido a su gasto reducido, se puede utilizar en horas en las que el coste de la energía es más alto, si la intensidad del calor es moderada.
Por su parte, el aire acondicionado puede ayudar en momentos de mayor calor y la recomendación es programarlo en una temperatura media (23 o 24 grados) y durante un tiempo prudencial. No utilizarlo durante muchas horas y tampoco encenderlo y apagarlo constantemente ya que el momento del encendido es en el que el equipo más consume.
Sunalizer también recomienda verificar en la web de la comercializadora o del Gobierno, cuáles son los horarios en los que la tarifa está más cara y cuáles en los que el precio baja. Esto puede cambiar por zona y hasta por días de la semana.
Instalación de paneles solares.
Si se introduce en el terreno de juego a los paneles solares la ecuación se inclina más a favor del aire acondicionado ya que esta alternativa combina eficiencia energética y beneficios a largo plazo, como por ejemplo una reducción de la factura de luz , lo que acaba compensando la utilización de sistemas un poco más costosos. Sunalizer explica que con una instalación solar de 4 kWp (instalación de una vivienda media en España) es probable que, aún con el uso del aire acondicionado, se puedan generar los excedentes necesarios para llenar una batería virtual y dejar la factura a 0€ en los meses de verano.