La exposición a sustancias nocivas puede afectar a la capacidad de una persona para concentrarse, coordinar movimientos, tomar decisiones y recordar información
Miguel Navarro, fundador y principal formador de la escuela online Productividad Feroz, comparte algunos consejos para superar los hábitos nocivos.
Con la llegada del sol y el buen clima, vuelven también las terrazas y las tardes con amigos y familia en los exteriores. El buen tiempo siempre invita al ocio y al consumo, juntando a amigos y compañeros de trabajo para compartir momentos de diversión tras la jornada laboral o los fines de semana. Aunque este tipo de actividades puede ayudar a la gestión del estrés y a mejorar el estado anímico, también incita en muchas personas las ganas de consumir sustancias psicoactivas como alcohol o tabaco.
Según datos del Ministerio de Sanidad, en España el 93% de la población de entre 15 y 64 años ha consumido alguna vez bebidas alcohólicas, mientras que hasta un 70% ha probado alguna vez el tabaco. Con respecto a sustancias ilegales, el número desciende considerablemente, un 37'5% de la población española ha probado el cannabis y esta cifra se sigue reduciendo con otro tipo de drogas.
Consecuencias del consumo de sustancias psicoactivas
A largo y medio plazo, las consecuencias del consumo de estas sustancias psicoactivas son terribles para la salud, dependiendo del tipo pueden producir problemas respiratorios, daño hepático, enfermedades cardíacas, enfermedades mentales o cáncer, entre muchas otras cosas. A corto plazo, este tipo de sustancias puede producir problemas muy graves en el día a día de cualquier persona, en su vida personal, problemas de ansiedad o a su productividad y rendimiento laboral.
En términos de productividad, las sustancias nocivas pueden tener un impacto significativo en el rendimiento. La exposición a sustancias nocivas puede afectar a la capacidad de una persona para concentrarse, coordinar movimientos, tomar decisiones y recordar información. Además, la intoxicación aguda y los síntomas de abstinencia pueden hacer que una persona se sienta mal y no pueda trabajar de manera efectiva.
Eliminar los hábitos nocivos
Dejar de lado estos hábitos tan nocivos puede ser complicado una vez se ha generado una gran dependencia, pero no imposible. Para esto, Miguel Navarro, fundador y principal formador de Productividad Feroz, la escuela online en la que se imparten cursos en directo sobre hábitos y formas de mejorar la productividad, recomienda seguir algunos pasos para poder superar estas adicciones:
Reconocer el problema. Es imprescindible ser consciente de que existe un problema y querer solucionarlo, ya que es la principal fuente de motivación durante todo el proceso del cambio.
Buscar ayuda. El proceso de abandonar un mal hábito no tiene por qué ser un viaje solitario. Es importante buscar la ayuda profesional de un médico, terapeuta, consejero o grupo de apoyo que pueda guiar al afectado por el mejor camino para abandonar las sustancias nocivas.
Establecer metas. Al igual que en cualquier otro objetivo en la vida, establecer metas es imprescindible para su cumplimiento. Si lo que se busca es dejar de lado un hábito nocivo como fumar, lo mejor es buscar metas realistas que se puedan cumplir a corto plazo y trabajar para lograrlas. Estas metas pueden volverse más estrictas con el paso de los días cuando se vayan cumpliendo objetivos.
Identificar y evitar desencadenantes. Cuando alguien busca dejar de lado una sustancia nociva, tiene que fijarse en los desencadenantes de su consumo y evitarlos, o desarrollar estrategias para manejarlos durante esas ocasiones de manera efectiva. Si se fuma cuando se sale de fiesta, lo mejor es o bien evitar la fiesta durante algún periodo de tiempo, o quizás evitar salir de la discoteca para no fumar, o incluso llevar chicles para cuando apetezca.
Desarrollar habilidades de afrontamiento. Es muy importante desarrollar habilidades de afrontamiento para lidiar con el estrés, la ansiedad, los celos y cualquier otra emoción que puedan llevar a la tentación de consumir sustancias nocivas.
Hacer cambios de estilo de vida. Mejorar la alimentación, hacer ejercicio regularmente y obtener suficiente descanso, puede ayudar a reducir el estrés y a mejorar la salud en general. Este cambio en los hábitos de vida puede ayudar a dejar atrás sentimientos negativos que inciten al consumo de sustancias nocivas.
Mantenerse motivado. Para mantenerse motivado en el proceso de dejar atrás una sustancia nociva, es importante celebrar las victorias y la consecución de objetivos con las personas que más te han apoyado, y recordar siempre el motivo que ha impulsado este cambio.
En general, abandonar un mal hábito es un proceso que lleva tiempo y esfuerzo, pero con el apoyo adecuado y el compromiso personal, es posible lograr una mejor calidad de vida siendo más saludables y productivos.