En España, al menos uno de cada cinco adultos sufre alguna modificación del sistema olfativo.

El olfato se puede entrenar mediante diferentes métodos, como el uso de aromas esenciales.

Como ocurre con otros sentidos, como la vista o el oído, también el sentido del olfato se ve afectado por la edad. Según diferentes estudios, la intensidad con la que se perciben determinados olores disminuye con la edad, sobre todo a partir de los 70 años1. A esto se suma que, según una revisión de estudios de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), en España, al menos uno de cada cinco adultos sufre alguna modificación del olfato palpable en su día a día2,3,4.

Ante esta situación, cada año el 27 de febrero, Día Mundial de la Anosmia, pone en valor la importancia del olfato. Es el sentido que nos permite reconocer situaciones familiares o identificar un peligro, por ejemplo, si un alimento está en mal estado o si algo se está quemando.

Como explica el doctor Luis Gutiérrez Serantes, "el olfato interviene incluso en la regulación del apetito y en las relaciones interpersonales. Por ello, cuando hay una modificación de la capacidad olfatoria las personas ven muy afectada su vida diaria". El experto incide en que, "cuando esto sucede, ya sea por la edad o por otras circunstancias, el olfato se puede entrenar".

Así, entre los diferentes métodos para entrenar el olfato, se encuentra la activación de la recordación del sistema olfativo a través del uso de aromas esenciales. "Esta práctica busca entrenar la capacidad cerebral para identificar olores, almacenarlos y recordarlos, acelerando de esta manera la recuperación de la sensibilidad olfatoria", explica el doctor Gutiérrez Serantes.

Entrenar el olfato con aromas de aceites esenciales

Este procedimiento ha sido desarrollado por médicos especialistas a través de 'planes de entrenamiento olfativo'. "Lo que buscamos es exponer a la persona a diferentes aromas esenciales de distinta intensidad para que el cerebro vaya recordando e identificando olores", expone el Dr. Luis Gutiérrez Serantes.

En este plan de entrenamiento olfativo se utilizan 3 sets con cuatro esencias cada uno, de diferente origen e intensidad: floral, cítrico, herbáceo y balsámico. La persona empieza realizando 2 sesiones, por la mañana y por la tarde, que duran alrededor de 10 minutos cada una. Este proceso, como aclara el doctor, "se realiza siempre con el asesoramiento de un médico especialista que previamente ha evaluado la causa y el tipo de modificación y que hará un seguimiento para evaluar los resultados".

En general, añade el doctor, "lo recomendamos para personas con alguna modificación olfativa que dura más de dos semanas. En esos casos, se debe iniciar el plan de entrenamiento cuanto antes, ya que se ha comprobado que las posibilidades de recuperación son mayores cuando antes se aborde la situación".