Como resultado de las actividades que realizan diariamente, tanto a nivel personal como profesional, las personas tienden a sufrir problemas en su columna vertebral en distintas etapas de su vida.
Uno de los problemas más comunes es la aparición de una hernia discal, una afección en donde la parte del disco intervertebral se desplaza hacia la raíz nerviosa, presionándola y provocando un dolor intenso. Con el objetivo de tratar esta enfermedad, los especialistas del Instituto Francés de Columna Biziondo llevan a cabo la descompresión axial vertebral.
La descompresión axial y los problemas de columna que se tratan mediante este método
La descompresión axial es un tratamiento no invasivo que sirve para tratar los problemas de hernia discal lumbar o cervical, sin necesidad de someterse a una dolorosa cirugía. Para llevar a cabo la descompresión axial, los especialistas utilizan una mesa computarizada, la cual permite incrementar el espacio entre las vértebras mediante la técnica de distracción.
Además de ser un procedimiento indoloro, la descompresión axial es efectiva porque crea una presión negativa que facilita la reabsorción de las hernias discales, evitando su desplazamiento hacia las raíces nerviosas. De esa manera, el médico especialista separa las superficies articulares impactadas, estira los músculos que presentan contracturas y disminuye el dolor.
Sin embargo, la descompresión axial no está recomendada únicamente para quienes padecen de una hernia discal lumbar o cervical, sino que también es un procedimiento efectivo para aliviar otras dolencias como la radiculopatía ciática, la estenosis de canal y el síndrome facetario, por lo que una evaluación médica y fisioterápica del paciente es fundamental.
¿De qué manera se lleva a cabo la descompresión axial vertebral en el Instituto de Columna Biziondo?
El Instituto Francés de Columna Biziondo es considerado como una de las unidades especializadas en tratamientos para la columna más completas de España, debido a que ofrece soluciones diferentes, seguras y modernas. En el caso de la descompresión axial, cada sesión dura entre 25 y 30 minutos y es supervisada por un fisioterapeuta que cuenta con la experiencia requerida.
Ya sea para tratar una hernia discal lumbar o cervical, el paciente permanece vestido y acostado sobre la camilla de descompresión, donde es asegurado con diferentes tipos de arnés. A través del sistema computarizado, el especialista controla la tensión de distracción, los tiempos de pausa y el desarrollo de la sesión, datos que son plasmados en una gráfica.
Para garantizar los mejores resultados, la fuerza de distracción con la que comienza el procedimiento se calcula con base en las condiciones físicas de cada persona, con un aumento paulatino en cada sesión. Por su parte, la frecuencia de las sesiones dependerá de la gravedad de la enfermedad, aunque es habitual realizar entre 2 y 3 sesiones por semana.
Las personas que presentan problemas en su columna y consideran necesario someterse a una descompresión axial pueden solicitar una cita previa para que un profesional evalúe su caso. De la misma manera, el fisioterapeuta es el encargado de determinar si es conveniente combinar la descompresión axial con sesiones de fisioterapia u ozonoterapia.