Según datos de ASCOM (Asociación Española de Compliance), tres de cada cuatro compañías de más de 200 trabajadores ya cuentan con un sistema de Compliance o tienen previsto desarrollarlo en los próximos cinco años.
El próximo 17 de noviembre se celebra el Día del Compliance Officer en España, que busca, desde la Asociación Española de Compliance (ASCOM), el reconocimiento explícito de la labor de una figura introducida en el derecho nacional hace más de una década para gestionar la responsabilidad penal de las personas jurídicas. "Es la persona que defiende los intereses de terceras partes dentro de la empresa y quien vela por lo que se debe hacer", según la Asociación.
Los datos proporcionados por la propia ASCOM recogen que el 75 % de las compañías con más de 200 trabajadores ya cuenta con un sistema de Compliance, o bien tiene previsto implantarlo en los cinco próximos años, pero aún queda una cuarta parte de estas compañías que no han desarrollado o ni siquiera tienen previsto un sistema de este tipo, fundamental para su correcto funcionamiento interno y externo.
Para Sylvia Enseñat, presidenta de ASCOM, el Compliance Officer es la persona responsable de "controlar, detectar y prevenir las malas prácticas" en las empresas, así como de "crear una cultura corporativa en la que la ética y las buenas prácticas están implícitas en todas sus actividades". "Su presencia en las empresas es imprescindible para que estas no incurran en una responsabilidad penal", concluye.
Según Antonio Quevedo, CEO de GlobalSuite Solutions, "la figura del Compliance Officer es fundamental por varias razones: su estrategia permite combatir las malas prácticas dentro de una organización empresarial y gestiona el buen funcionamiento de un canal de denuncias, necesario para dar una imagen de transparencia corporativa, entre otras funciones de vital importancia para su empresa".
Entre las labores del Compliance Officer, se encuentran:
Impulsar y supervisar la implementación y eficacia del sistema de gestión de Compliance penal en la organización;
Garantizar el apoyo formativo continuo a los miembros de la organización;
Remarcar las responsabilidades de Compliance Penal en las descripciones de los puestos de trabajo;
Poner en marcha uncanal de denunciasde Compliance Penal;
Gestionar la información, las reclamaciones y los comentarios recibidos de líneas directas, un canal de denuncias u otros mecanismos;
Establecer indicadores de desempeño de Compliance Penal en la organización;
Analizar el desempeño para identificar las acciones correctivas necesarias;
Identificar y gestionar los riesgos penales, también los relacionados con los socios de negocio;
Proporcionar a los empleados acceso a los recursos de Compliance;
E informar al órgano de gobierno de los resultados de la aplicación del sistema de gestión de Compliance penal.
GlobalSuite Solutions apuesta por el servicio de Compliance Penal
La labor del Compliance Officer resulta muy compleja, de ahí que GlobalSuite Solutions ofrezca un servicio de Compliance Penal, que ayuda en la gestión diaria de las tareas del cumplimiento de las organizaciones desde un único lugar: el software GlobalSuite®, que permite la implantación, gestión y mantenimiento de todos los requisitos exigidos por las normas de sistemas de gestión en todo tipo de organizaciones y sectores.
La ayuda que aporta este software supone múltiples beneficios para las compañías y también para el propio Compliance Officer, en su quehacer diario a la hora de implantar estos sistemas en su organización.
