Lefebvre,?proveedor de software y contenido jurídico de reconocido prestigio en España, lamenta profundamente la decisión adoptada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en el expediente C/1295/22 por el que autoriza la compra de Thomson Reuters Aranzadi y Wolters Kluwer por parte del grupo empresarial escandinavo Karnov anunciada el pasado 6 de noviembre.
La decisión de la CNMC provoca desolación en el sector ya que Lefebvre considera que la fusión de los dos competidores supone que el nuevo actor – según la propia información enviada a los accionistas dentro del documento denominado ‘Informe Isabella’- concentrará un porcentaje mayoritario del mercado, en contradicción con la letra y el espíritu de la legislación en materia de libre competencia.
Para Lefebvre y otros actores importantes del sector, supone una gran sorpresa el curso errático y confuso que ha seguido la CNMC, sin que el texto de su decisión se conozca más de una semana después de su adopción. El organismo regulador no ha permitido la participación en el proceso a Lefebvre, ni al resto de competidores que manifestaron de su interés en intervenir como partes interesadas en el expediente. Pese a tan llamativa desconsideración, la CNMC ha solicitado y recabado información compleja y sofisticada a Lefebvre y al resto de los operadores en el mercado en varios momentos. Diez días antes de la anunciada resolución, la CNMC comunicó y solicitó a varios actores del sector, incluido Lefebvre, la opinión acerca de tres llamativos por ineficaces compromisos propuestos por el Grupo Karnov para poder ejecutar la fusión. Estas medidas de ajuste solicitadas por parte de la Comisión apuntan dudas sobre la operación de compra respecto del mercado. Ni Lefebvre ni ninguno de los seis actores personados en el expediente ha recibido respuesta o comunicación alguna por parte del organismo a los argumentos, ampliamente detallados, en contra de unos compromisos que a juicio de Lefebvre eran medidas de carácter cosmético, sin alterar en ninguno de los extremos en los que la intervención del operador resultante de la concentración incidirá negativamente en la libre competencia en el mercado.
Las consecuencias de esta situación afectarán directamente a los clientes-usuarios finales y a la estructura actual del sector. Ocasionará desorientación y desconexión de alguna de sus soluciones actuales para una gran masa de usuarios.
En fin, esta operación de fusión impactará directamente en las personas de ambas organizaciones debido a que el Grupo Karnov ya había anunciado en la documentación preliminar (Informe Isabella) optimizaciones de costes y reestructuración de personal por importe de más de 20 millones de euros.
Lefebvre y los restantes actores están analizando si promoverán un procedimiento contencioso administrativo con la esperanza de que la Jurisdicción sea más respetuosa con los intereses socioeconómicos en juego, que han sido arruinados por la decisión administrativa.