Cobra una importancia fundamental el trato humano ya que tienen dificultad para tolerar las esperas y la sobreestimulación sensorial
Vithas trabaja constantemente y de una manera prioritaria en la experiencia paciente como eje de toda la atención sanitaria
El trastorno del espectro autista (TEA) es un trastorno neurobiológico y de desarrollo. Abordar cada día la relación con una persona diagnosticada con TEA precisa de conocimiento, formación y estrategias de abordaje. Por este motivo, el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre ha realizado una formación dirigida al personal sanitario de urgencias, para la adquisición de las habilidades necesarias a la hora de actuar ante pacientes con autismo ya que la imposibilidad de anticipar ciertas urgencias hospitalarias implica un reto para todos los agentes implicados en la salud de la persona con TEA.
Esta iniciativa está promovida desde dirección de enfermería de Vithas Valencia 9 de Octubre con el objetivo de mejorar la atención a las personas con TEA, sobre todo por los problemas para comprender el entorno y las dificultades de comunicación que en muchas ocasiones tienen asociados. Tal como explica Paula Castells, directora de enfermería, "las personas con TEA y sus familias necesitan de un sistema de salud comprensivo y flexible que se adapte a sus particulares barreras. En esta flexibilidad cobra una importancia fundamental el factor humano ya que tienen dificultad para tolerar las esperas y la sobreestimulación sensorial".
La doctora Marian Ferrus Pérez, médico y catedrática del departamento de biotecnología de la UPV, presidenta de Plena Inclusión Comunidad Valenciana y vicepresidenta de CERMI Comunidad Valenciana, ha sido la encargada de impartir la sesión y ha subrayado que "las personas con TEA viven dos condiciones bastante particulares, primero, tienen necesidades médicas, muchas veces superiores a las necesidades de otras personas, y segundo, confrontan grandes inconvenientes al momento de acceder a los servicios de salud, particularmente a los servicios de urgencias, convirtiéndose, en la mayoría de los casos, en experiencias traumáticas y muy desagradables".
El paciente con TEA presenta muchas dificultades para poder explicar lo que le ocurre, ya que no sabe identificar sus síntomas, y tiene problemas para adaptarse a nuevos lugares y personas que no conoce, como es el caso de las salas de urgencias y el personal sanitario.
"Entre otras manifestaciones clínicas frecuentes, -comenta la especialista-, se encuentra la reacción exagerada o reacción negativa a la estimulación sensorial y/o habilidades de comunicación limitadas que les impide explicar claramente sus síntomas. Por ello es fundamental aplicar estrategias eficaces y prácticas que puedan lograr que el paciente con TEA se sienta más cómodo y, por tanto, pueda colaborar más y sentir mayor bienestar".
Entre muchas de las directrices que ha marcado la doctora Ferrus, ha destacado la importancia de "que, desde la entrada al servicio de urgencias, exista la menor variabilidad en el número de individuos y de lugares o zonas por los que tiene que pasar buscando un lugar tranquilo, libre de objetos peligrosos, con poco ruido y poca gente. Incluso si es posible, utilizar un único BOX para todas las pruebas evitando las salas"
Por otra parte, la especialista ha destacado, "propiciar un trato afectuoso, dirigirnos directamente al paciente con un lenguaje sencillo y permitirle mantener un objeto que le transmita seguridad, incluso prever la utilización de pequeños sedantes o anestesias en la exploración", comenta la doctora Marian Ferrus.
Además, la profesional resalta el papel clave de los familiares "ya que son ellos quienes pueden ayudar a tranquilizar al paciente por el conocimiento estrecho que tienen de la persona con TEA con la que conviven y de la interpretación que hacen de su conducta. Es importante que acompañen al paciente en todo momento".
Experiencia paciente
Vithas trabaja constantemente y de una manera prioritaria en la experiencia paciente como eje de toda la atención sanitaria. Tal como explica Paula Castells, "el paciente es nuestra razón de ser. Debemos proporcionar la humanización necesaria y la seguridad que precisa el enfermo en una situación crítica o angustiosa para él y sus familiares, donde cuidar la parte emocional es igual de importante que la propia enfermedad".
