La web de jóvenes y adolescentes Red17 hace un llamamiento a la actuación frente al cambio climático.
El cambio climático es una palabra grande y aterradora. Suena como algo que sólo afectaría a los habitantes de países lejanos, o como algo que ocurre en la naturaleza y no tiene impacto en nuestras vidas. El cambio climático es un problema global que afecta a todo el mundo de una manera u otra. Sin embargo, los jóvenes son especialmente vulnerables porque todavía no han contribuido tanto como sus padres al problema del cambio climático. Por ello, sufrirán sus consecuencias más que otras generaciones.
El cambio climático está provocando más fenómenos meteorológicos extremos, como huracanes e inundaciones en lugares donde anteriormente no ocurrían. Un ejemplo de esto han sido los tornados avistados en el sur de Francia en octubre o el huracán que se formó en el Atlántico norte en el mes de septiembre. Este tipo de fenómenos meteorológicos pueden provocar inundaciones, daños materiales y también pueden poner en peligro la vida de las personas. Si no estás preparado para este tipo de fenómenos meteorológicos, puedes correr el riesgo de sufrir lesiones o incluso de morir. Una medida para tratar de proteger a la población, es la educación en materia de seguridad, o el sistema de alertas móviles que se ha comenzado a aplicar en España y se trasladará a toda Europa. Estos sistemas de alarma, avisarán en donde se esté de los avisos y peligros que pueden ocurrir en la zona debido a desastres naturales, como incendios, lluvias fuertes, etc.
Otra forma en que el cambio climático afecta a los jóvenes es disminuyendo los campos de cultivo. Con una menor producción de plantas, la comida comenzará a escasear. Esto producirá un efecto en cadena, ya que una menor vegetación, conlleva a una mayor concentración de contaminantes en el aire. Esto puede derivar en enfermedades respiratorias y finalmente en una vida más complicada.
La mejor manera de frenar los efectos del cambio climático es reducir la huella de carbono, es decir, la cantidad de dióxido de carbono que se produce. Esto significa utilizar menos electricidad y combustibles fósiles para que haya menos gases de efecto invernadero en la atmósfera. También reduciendo el consumo de carne, y de bienes que requieran transporte internacional. Una apuesta segura es apostar por productos locales y el reciclaje. En la actualidad esto es un trabajo difícil, ya que con el proceso de globalización, podemos acceder a productos de todo el mundo. Además, la moda del "fast fashion" o los productos de usar y tirar, son de los más contaminantes y a su vez de los más consumidos entre la población joven, como han confirmado los lectores de red17. Los bajos precios, la comodidad de recibir el producto en nuestra propia casa y las modas cada vez más rápidas promocionadas en redes sociales, son los principales estímulos para aumentar el consumismo de productos altamente contaminantes en su proceso de fabricación.
El trabajo para reducir nuestro impacto en el cambio climático es conjunto. Es necesario que tanto los gobiernos, grandes empresas, y pequeño consumidor sumen sus esfuerzos para disminuir la aceleración de este proceso. Mientras esto no ocurra, comenzaremos a notar cada vez los efectos más notables del cambio climático, como han sido las temperaturas anormalmente altas durante el mes de octubre en toda España.
Desde red17 trabajamos en reducir el impacto en la huella de carbono, y animamos a realizar pequeñas acciones todos los días que pueden ayudar a mejorar nuestra calidad de vida y preservar el medioambiente.