Entrando en la temporada otoñal, son muchos los que añoran los días de verano, los rayos de sol, las tardes de playa y todo lo que acompaña a la que quizás sea la estación favorita de un gran porcentaje de la población.

Tanto para familias como para amigos o parejas, el resort de lujo situado en la costa suroccidental de Tenerife es la perfecta solución para romper con el tedio de la vuelta a la rutina y regresar a los días del dolce far niente. Es también la opción ideal para aquellos que deseen activarse después del verano y disfrutar de unas vacaciones de deporte y aventura al aire libre, ya que The Ritz – Carlton, Abama adapta su amplia oferta a las necesidades de todo tipo de viajeros.

Escapadas de fines de semana, festivos que se convierten en puentes o simplemente unas vacaciones fuera de la temporada estival, son oportunidades perfectas para disfrutar de las infinitas posibilidades y buen clima que un lugar como Tenerife, y en concreto la localización de este resort de lujo.

¿Utopía o realidad?

Rodeado de naturaleza y con una vegetación subtropical frente al océano atlántico, el resort, que parece producto de la fantasía, ofrece múltiples posibilidades a la hora de relajarse y disfrutar. Su vasta extensión incluye exuberantes jardines botánicos, ocho restaurantes -dos de ellos con estrella Michelin–, siete piscinas, acceso cercano a un prestigioso campo de golf, pistas de tenis y un sinfín de instalaciones y servicios que harán que sus huéspedes disfruten de un eterno verano durante todo el año.

The Ritz-Carlton, Abama es un hotel lleno de experiencias para el cuidado de cuerpo y mente, en el que, desde hace dos años, es posible disponer de una privacidad única gracias a su concepto Villa Club, con habitaciones y suites situadas en calles privadas rodeadas de jardines y piscinas semi-privadas.

El refugio perfecto para las parejas en búsqueda de intimidad que deseen descubrir el significado de la verdadera desconexión estará en la Calle del Mar, con sus exclusivas estancias adults-only.

Un destino, múltiples actividades

Adaptado para cualquier tipo de viajero, The Ritz-Carlton, Abama es el destino ideal para los amantes de los deportes al aire libre con los que disfrutar del buen clima de la región. Actividades como el golf en uno de los mejores campos de Europa, tenis, deportes acuáticos, senderismo y rutas en bicicleta están a solo un paso de ser descubiertos.

Del mismo modo el resort brinda a todos sus huéspedes acceso directo a la playa de Abama, donde cuentan con un área privada de hamacas y sombrillas, el servicio del staff, y un Beach Club que ofrece platos frescos y ligeros, bebidas y cócteles.

Por supuesto hablar de Tenerife también es hablar de mar, por lo que asimismo será posible organizar una jornada de navegación en barco para avistar ballenas, una actividad perfecta para disfrutar en familia fuera de las instalaciones del hotel.

Pensando también en los más pequeños, encontramos Ritz Kids, el club infantil de Ritz-Carlton más grande de Europa que fomentará el sentido de aventura de los niños conectándolos con los valores de la exploración y el descubrimiento y mostrándoles un universo de nuevos conocimientos sobre la naturaleza, las manualidades y el deporte.

The Ritz-Carlton Spa ofrece una amplia variedad de tratamientos revitalizadores inspirados en el mundo natural y las tradiciones locales. Tratando de buscar el reposo de cuerpo y mente, el circuito de Aguas en The Ritz-Carlton Spa se inspira en las tradiciones clásicas del baño romano en el que los huéspedes recorren un ciclo de tratamientos y experiencias basadas en el agua como elemento fundamental para estimular su metabolismo.

El gimnasio, abierto las 24 horas, ofrece una variedad de máquinas de ejercicio cardiovascular de última generación, con bicicletas de spinning en la terraza al aire libre. Senderos para correr y caminar a través de los jardines botánicos son parte esencial del recorrido del huésped que desea disfrutar y ejercitar su cuerpo al aire libre.

Refugio gastronómico en la isla de Tenerife

The Ritz-Carlton, Abama es, además, un destino gourmet en sí mismo. Con un total de tres estrellas Michelin, el resort resultará perfecto para los viajeros que además de relax y aventuras busquen gastronomía de autor.

En primer lugar se encuentra M.B, galardonado con dos estrellas, cuyos responsables de su inconfundible éxito ,el Chef Erlantz Gorostiza y Martin Berasategui - quien acumula nada menos que doce estrellas – no cesan de trabajar para ofrecer el servicio y calidad que un restaurante de este calibre requiere. Continua la trayectoria Kabuki -con una estrella y con el reputado chef Ricardo Sanz al mando, - un espacio cuenta con las que posiblemente sean una de las vistas más instagrameables del resort, además de, por supuesto, una fusión única de cocina japonesa y mediterránea.

Los huéspedes también podrán degustar exquisitos platos, inspirados en la gastronomía local de la isla y el concepto culinario terramar del chef César González en El Mirador, el cual ha renovado su oferta gastronómica manteniendo sus impresionantes vistas al mar y a la isla La Gomera.

De igual forma, el Beach Club del hotel con un concepto pensado para seducir igualmente al público local tinerfeño que se desplace hasta la playa de Abama; un chiringuito-chill out ofreciendo una amplia variedad de platos y creativos cócteles para disfrutar en su zona de hamacas.

Completan la oferta Verona, un italiano con mucho encanto que enamorará a los apasionados de esta cocina y Txoko, el restaurante de cocina tradicional ideado por Erlantz Gorostiza con un conjunto de platos innovadores inspirados en las raíces de la cocina tradicional vasca.

Sea cual sea la intención detrás de la escapada, The Ritz – Carlton, Abama hará sin duda querer repetir mil y una veces para regresar aunque sea durante unos días al sol y la playa de la mano del mejor servicio y calidad.