Desde un Montecillo Edición Limitada, pasando por Viña Monty hasta Montecillo 22 Barricas son algunos de los vinos más singulares de Bodegas Montecillo y un acierto para esos momentos en los que buscamos compartir con los nuestros, lo mejor!
Bodegas Montecillo es sinónimo de vinos excepcionales, auténticos y garantía de éxito en la elección de cualquiera de sus gamas: clásica, añadas históricas, vinos de autor o Viña Monty. Bodegas Montecillo, tercera bodega más antigua de la D.O.Ca. Rioja, se encuentra entre la élite de ese grupo de bodegas centenarias porque elabora riojas de larga guarda desde hace más de 150 años. En la actualidad mantiene intacta su filosofía de trabajo en búsqueda y selección de los mejores viñedos para luego elaborar sus vinos de una forma respetuosa y fiel a su origen. Es por esto que los vinos de esa casa te aseguran la excelencia con una selección de sus tintos y blancos que seguro te harán disfrutar a ti y a los tuyos en cualquier celebración o encuentro estival alrededor de una mesa.
Montecillo Edición Limitada 2016 es sin duda uno de los tintos de la casa más asequible a pesar de su extraordinaria complejidad, fruto de la selección de dos variedades Tempranillo y Graciano provenientes de viñedos de más de 50 años y una elaboración y crianza particular: ambas variedades se vinifícan y crían por separado, luego se ensamblan para tener otros 6 meses extra en barricas francesas y mixtas como vino único. ¿El resultado? Contundencia y elegancia aseguran el éxito entre los amantes de los vinos de Rioja más vanguardistas. Un vino perfecto para comidas o cenas con presencia de carnes rojas, embutidos muy curados e incluso platos variados muy elaborados como guisos o arroces.
Montecillo 22 Barricas Gran Reserva 2011 un tinto muy especial que emula la forma tradicional de elaboración del fundador de la Bodega a finales del siglo XIX. Criado durante 32 meses en barricas de roble francés de grano muy fino y en botella durante mínimo 48 meses en la calma y oscuridad del calado manual subterráneo en una elaboración súper limitada a 6.600 botellas, es uno de los grandes clásicos de Rioja, un Gran Reserva de libro que no puede faltar en esa cena íntima en pareja que permitirá disfrutarlo durante una larga velada.
Viña Monty Viura Reserva 2017 un blanco de talla internacional, a la altura de los mejores vinos blancos del mundo. La viura procede de un viñedo muy muy viejo en Sotés, en Rioja alta, que nos permite tener un vino estructurado, con una mineralidad sublime, acidez exquisita y de gran complejidad. Compañero ideal para esas comidas de verano en la terraza con amigos con mariscos, y pescados como protagonistas de la mesa.
Viña Monty Graciano Reserva 2015 es un tinto ideal para los amantes del vino que buscan sorprender con la varietal más buscada por los winelovers en Rioja, la Graciano. Si a esto sumamos que es nada más y nada menos que “el mejor Rioja del Mundo y mejor Graciano del Año” resulta imposible no rendirse ante él. Se trata de una de las variedades tintas minoritarias de Rioja de una parcela en Cenicero con suelos de arcilla y arena, que da como resultado un vino sedoso, con notas minerales que matizan el perfume especiado de pimientas y clavo. Es garantía de éxito en aquéllas celebraciones donde ningún detalle se deja al azar.
Cualquier ocasión es buena para brindar con las personas más cercanas y queridas y estos rioja serán sin duda un componente excelente para que la celebración sea memorable.
SOBRE BODEGAS MONTECILLO
Fundada en 1870 por Don Celestino Navajas Matute y adquirida en 1973 por la Familia Osborne, Bodegas Montecillo es la bodega más antigua de Fuenmayor y la tercera bodega más antigua de la D.O.Ca. Rioja. Su compromiso con la excelencia y su apuesta por la calidad le han convertido en uno de los referentes de larga guarda a nivel mundial. Sus calados subterráneos albergan añadas desde 1926 además de un impresionante botellero manual, donde cientos de botellas de Gran Reserva se apilan a mano unas sobre otras, sin ningún soporte y con tanta precisión y firmeza que se podría andar sobre ellas. Un proceso tan artesanal como ancestral, donde el vino descansará intacto hasta alcanzar la máxima calidad que ofrece el poder reductor del paso del tiempo. El resultado son vinos que reflejan el espíritu visionario de dos grandes familias apasionadas por el vino; el legado centenario detrás de un nombre eterno: Montecillo.