El incremento se produce tras las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que augura un futuro “sombrío y más incierto” en sus perspectivas económicas 

Las previsiones para España caen ocho décimas y 1,3 puntos para 2022 y 2023 respectivamente, según el FMI 

La agencia SEO, Eskimoz, alerta del incremento superior al 200% de las búsquedas de los usuarios en internet sobre recesión e inflación en España durante el último mes 

La preocupación en España por el riesgo de recesión y el proceso de inflación que estamos viviendo ha aumentado considerablemente en el último mes, según recoge el Informe de Tendencias de los Buscadores del departamento de análisis de la agencia SEO Eskimoz. Un miedo a un frenazo económico que se traduce en un aumento de más del 200% de las búsquedas sobre recesión e inflación en nuestro país y que va acompañado de las noticias del FMI, que ha reducido el crecimiento de la economía española para los próximos dos años. 

Los datos de la agencia SEO especializada en posicionamiento orgánico sostienen un aumento del 207% en las búsquedas sobre la inflación en España en el último mes. Los usuarios españoles, en base a esta tendencia, también han provocado un notable incremento del 80% en las búsquedas sobre la inflación en Europa. Igualmente, el análisis recoge una subida del 852% en las búsquedas sobre una recesión económica en 2022 y de más del 654% en las que respecta a qué supone sufrir una recesión económica.

Además, según el análisis de la agencia líder en posicionamiento orgánico, las búsquedas sobre la recesión destacan en zonas como Extremadura, Aragón o Navarra. Por el contrario, la preocupación sobre la inflación cobra mayor relevancia en territorios como La Rioja, Comunidad de Madrid o Canarias. 

Esta tendencia apunta a incrementarse en los próximos días tras las previsiones publicadas por el Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, ya se observaban numerosos indicios ya que, como revela el informe de Eskimoz, desde principios de julio el término inflación había cobrado relevancia y sus búsquedas aumentaron en los principales motores. 

Los términos de búsqueda monitorizados por la agencia Eskimoz guardan relación con las últimas noticias procedentes del Fondo Monetario Internacional, que en su último informe ha alertado del riesgo de recesión en 2023 como consecuencia de la espiral inflacionista y de la invasión rusa de Ucrania. Respecto a España, este mismo informe ha reducido las previsiones de crecimiento que venía defendiendo el Gobierno. 

El FMI ha titulado su informe sobre la Actualización de las Perspectivas Económicas Mundiales con la frase como Sombrío y más incierto. Un detalle que ha sido suficiente para observar el pesimismo que predomina en el organismo internacional.

España, con ese crecimiento de búsquedas sobre qué es la inflación y sobre el riesgo de recesión, sufrirá, según el FMI, un descenso de las cifras de crecimiento previstas para 2022 y 2023. Según sus datos, la economía española crecerá un 4% y un 2% respectivamente, lo que supone un descenso del 0,8% y 1,3% en las previsiones de los dos próximos años. 

Riesgo de recesión 

Pese a ello, el Gobierno ha reafirmado que prevé un crecimiento del PIB del 4,3% este 2022 y simplemente ha reducido la perspectiva de 2023 al 2,7%, ocho décimas menos que en su anterior análisis. Una posición que se suma a la de Nadia Calviño, ministra de Economía, quien hace unas semanas descartó el riesgo de recesión y calificó como “fuerte” el crecimiento de España. 

El Fondo Monetario Internacional, sin embargo, se encuentra más cercano a la postura de la población española, quien por medio de sus búsquedas ha confirmado la preocupación existente respecto a la economía. El FMI no ha dudado en alertar del riesgo de recesión en 2023 si se llega a producir un corte de suministro de gas por parte de Rusia. 

“Estados Unidos y la zona Euro tendrán un crecimiento cercano a cero el próximo año, con efectos negativos colaterales para el resto del mundo”, ha reconocido Pierre-Olivier Gourinchas, director de estudios del FMI. Ese escenario, posible si Rusia cierra el suministro de gas, irá acompañado de un aumento de la inflación y de una desaceleración del crecimiento mundial cercano al 2%.