Meritorio top 8 para el jugador catalán de Giants, quien esperaba más y ya se concentra para la gran cita de los videojuegos de lucha
Joan 'Shanks' Namay, jugador de Giants, ha acabado octavo en los Mundiales de Dragon Ball FighterZ celebrado este pasado fin de semana en París (Francia). Este torneo es la antesala de lo que le espera en agosto en Las Vegas, donde tiene lugar la próxima edición del EVO, considerado el gran campeonato internacional de los videojuegos de lucha.
Este top 8 en el Dragon Ball FighterZ World Championship es un resultado muy meritorio pero no completamente satisfactorio para Shanks, cuyas expectativas eran todavía más altas. El jugador catalán no experimentó las mejores sensaciones durante el torneo que organiza Bandai Namco.
Shanks se metió en la fase final tras conseguir un resultado de dos victorias y una derrota en el grupo B. Ya en las rondas eliminatorias, Shanks casi materializa una remontada milagrosa ante el japonés Ikoan, que finalmente fue quien avanzó a cuartos de final.
El luchador de Giants admitió que no encontró su nivel durante ninguna fase del torneo, pero aseveró que su paso por París "fue un buen entrenamiento de cara al EVO". "Voy a aprovechar lo que queda para entrenar para el EVO y hacerlo lo mejor posible. Y, pensándolo fríamente, hacer top 8 en estas finales no es un mal resultado", declaró Shanks tras el evento.
Es en el EVO donde se reúnen todos los grandes jugadores de todos los videojuegos de lucha y en donde Shanks confía en repetir la gesta de 2019, cuando hizo un inolvidable cuarto puesto del mundo y se consolidó como uno de los jugadores profesionales de esports más importantes de España, amén de un referente dentro de los fighting games a nivel internacional.