Ölivia Musyk publican "Clamare" que es el transcurso de Antich Ventura, tres piezas que articulan la necesidad de prolongar el adiós y, al mismo tiempo, son un caleidoscopio de las múltiples siluetas que toma la despedida en el folclore popular de nuestras carnes. Lo hacen bajo el sello de Amen Discos y Masanai.

La colaboración es el epicentro de la segunda cara de este trabajo. Al piano, violín y voz de Ölivia Musyk se suman las melodías, letras e ideas de tres artistas de diferente cuna. El primer movimiento, “Encara ens surten flors” sucede en la atmósfera astral de la pianista, productora y cantante Marina Herlop, un poema sobre el vacío físico y emocional. "Prune" es el retrato musical de la expresión más familiar del dolor, el llanto. Al lado del cantautor The Bird Yellow conforma el segundo movimiento. “La Xarranca”, el tercer movimiento, pone luz sobre las trampas culturales que utilizamos para evadir inocentemente toda noción de muerte. Como un mar de voces, el dúo de canto a capella Tarta Relena deja huella en este juego musical.

Para esta última triada que conforma su primer trabajo titulado “Antich Ventura - Clamare”, las catalanas emprendieron una campaña de micromecenazgo para poder financiar parte del proyecto y hacer posible el formato físico y audiovisual de esta segunda cara, que terminó con éxito hace unas semanas.

La atmósfera del directo expresa la necesidad de darle un sentido musical a la pérdida y articular un adiós. Con el apoyo literario y musical, Ölivia Musyk, crea un espacio colectivo donde explorar el duelo y presenta un caleidoscopio de múltiples siluetas que toma la despedida en el folclore popular de nuestras carnes.

El Festival BarnaSants acogió el estreno del directo el pasado 5 de mayo en la Sala Harlem de Barcelona.

Sobre Ölivia Musyk

Ölivia Musyk es un proyecto musical que nace el 2020 de la mano de Clàudia Balletbó (voz) y Isabel Archs (violín i piano) como una iniciativa dedicada a la creación de microproyectos que fusionan música y literatura. Son palabras musicadas y composiciones experimentales ubicadas entre el clásico y el mainstream íntimo con el sustento de las herramientas de postproducción electrónica y experimental. Como característica, los álbumes de Ölivia Musyk se estructuran en forma de tríada: tres temas que forman una unidad conceptual de raíz literaria. La creación de microproyectos permite dotar de conciencia y poliedricidad a la estética y al contenido de los proyectos colaborando con varios artistas de otras disciplinas.

La primera vez que el proyecto de Ölivia Musyk vio la luz, fue en la primavera del 2021 con la primera parte de su trabajo primigenio, la cara A: "Antich Ventura". Esta primera cara es una tríada que nace de la necesidad de darle un sentido musical a la pérdida. Una primera parte con tres movimientos que piensan y experimentan la muerte desde la posibilidad de brotar nuevas facultades de sentir y percibir.