Aprender a leer no es solo una obligación del currículum escolar, sino también una forma de que los niños y niñas aprendan vocabulario, conceptos, desarrollen su imaginación, así como la comprensión lectora. La lectura les ayudará también a estudiar mejor, a escribir sin faltas de ortografía y a mejorar su expresión oral y escrita. Pero ¿cómo hacer que los niños lean?
Pilu Hernández Dopico, maestra, formadora de formadores y CEO de El Pupitre de Pilu, tiene claro qué es lo que mejor funciona para que los pequeños se acostumbren a tener un libro en sus manos y se sientan atraídos por la lectura: "Si queremos que nuestros menores se apasionen por la lectura, lo mejor que podemos hacer es sentarnos a leer con ellos".
Para que los niños puedan sacar provecho de todas las virtudes que les aportará la lectura a medida que vayan creciendo es necesario que exista una estrecha relación con los libros desde la más tierna infancia "y que los padres den ejemplo. El ejemplo es la herramienta más poderosa de la educación. Si un padre lee, su hijo acabará haciéndolo también", confirma la maestra. Pilu Hernández Dopico subraya que "aunque en la actualidad las nuevas tecnologías nos brindan muchas formas de leer, desde libros digitales a audiolibros, es bueno que los niños se inicien con los libros en papel".
La amplia oferta literaria existente facilita adaptar la lectura a cada edad e incluso gustos o aficiones de los más pequeños, lo que será de gran ayuda para captar su atención. Pilu Hernández Dopico comenta que "la lectura que elijamos para nuestros niños debe estar adaptada a su edad. Hoy en día contamos con múltiples formatos, desde libros con solapas, en 3D, pop-up, aquellos que se leen a oscuras… que harán que los más pequeños se sientan atraídos por la gran variedad y versatilidad con la que cuenta la literatura. Los padres debemos ser su guía y ayudarles a descubrir este mundo tan interesante y amplio".
La experta aporta 5 claves para fomentar la lectura en las familias:
Crear una rutina desde pequeños. Al irse a la cama es un buen momento para leer un cuento, acompañándolos cuando son más pequeños para que cuando ya sepan leer lo puedan hacer ellos solos.
Crear el hábito de ir a librerías, si son de barrio mucho mejor. Enseñarles a ver los libros, ojearlos y que compren el que más les guste.
Es importante que vean leer a los padres, predicar con el ejemplo. Si los niños ven que los padres dedican un tiempo de su día a la lectura, será más fácil que lo incorporen también a sus rutinas.
Llevarlos a las bibliotecas, son espacios maravillosos para que descubran que los libros también se pueden prestar, aprendan a tratarlos bien porque es un libro compartido y vean que no solo se pueden comprar.
Tratar los libros como un regalo especial, regalárselos a ellos y a los amigos en sus cumpleaños.