Villa Pehuenia y Moquehue son dos aldeas de montaña en el centro-oeste de la provincia de Neuquén, Argentina. Fundadas hace sólo 33 años, se imponen entre los destinos favoritos de quienes buscan la experiencia de la naturaleza virgen, así lo traslada Visit Argentina. Bosques de araucarias milenarias, nieve, senderismo entre lagos y ríos cordilleranos y playas con arena volcánica destacan entre los atractivos de este tesoro patagónico
No importa desde dónde se mire, en Villa Pehuenia y Moquehue las araucarias son las estrellas del paisaje. Estos árboles milenarios, considerados sagrados por los pobladores originales, que se alimentaban de los frutos, las araucarias o pehuén en su lengua ancestral, le dan nombre a la Villa. Esta es la única región del mundo con bosques naturales de araucarias, especies protegidas que pueden alcanzar hasta 40 metros de altura.
En los alrededores de Pehuenia y Moquehue, los viajeros pueden explorar y disfrutar de más de 100 playas de arena volcánica que se despliegan entre los azules profundos de los lagos Aluminé y Moquehue. Cada una de ellas es una invitación al descubrimiento: playas solitarias, escondidas, extensas, pequeñas, cercanas, alejadas. Una aventura cada día. La belleza de los lagos es una constante en esta zona de ensueño, a sólo 5 km del centro de la Villa, encontrarás otro escenario panorámico deslumbrante: La Angostura un río de 500 metros que nace de la unión del Aluminé y el Moquehue. Una maravilla natural desbordada de araucarias, coihues y otras especies nativas como la rosa mosqueta. También es posible embarcarse en diversas actividades náuticas en el Golfo Azul, otro paisaje de encanto.
Para la temporada de nieve, el Batea Mahuida es una de las opciones preferidas. Este parque de nieve en el volcán que le da nombre tiene 8 pistas y está gestionado por una comunidad originaria local. Cuenta también con trineos y excursiones en moto de nieve. Desde este cerro se puede disfrutar de la maravillosa vista que ofrecen los lagos Aluminé y Moquehue y los volcanes Villarrica, Llaima y Lonquimay.
Los otoños y las primaveras son dorados en estas aldeas, vistas mágicas, con múltiples actividades que incluyen senderismo, trekking, deportes náuticos y actividades lacustres y desde luego, la cocina patagónica que es otra de las protagonistas de Villa Pehuenia, declarada capital gastronómica de la provincia de Neuquén.
Cada mayo se celebra en Pehuenia el Festival del Chef Patagónico. Una propuesta de sabores exquisitos que se funden con la majestuosidad de los bosques de araucarias. Los mejores chefs se reúnen para proponer platos exquisitos que se fusionan con el ingrediente protagonista del evento: el piñón, el fruto ancestral sagrado de la araucaria. Fuegos, vinos neuquinos, cerveza artesanal, pinchos de ciervo, empanadas de cordero, música y alegría en estos encuentros de otoño en Pehuenia.
Villa Pehuenia y Moquehue cuentan con infraestructura para alojarse en cualquier época del año. Se recomienda visitarlas entre noviembre y abril y para los que buscan nieve, durante julio y agosto.
Descubrir la Ruta de las Araucarias Milenarias y sus paisajes entre lagos y ríos de montaña.