El Parkinson evoluciona de un modo distinto en cada persona y hoy en día no tiene un tratamiento curativo
La estimulación cerebral no invasiva emerge como un tratamiento seguro y eficaz para abordar esta patología, en combinación con el apoyo psicológico
Aunque las personas con Parkinson no tienen un mayor riesgo de contraer Covid-19, éstas pueden desarrollar afecciones graves si contraen el virus
En España, más de 160.000 personas conviven con el Parkinson, una patología asociada al envejecimiento de la persona, temblores, rigidez muscular y pérdida de control postural. Según la Federación Española de Parkinson (FEP), 1 de cada 5 personas tiene menos de 50 años en el momento del diagnóstico y un 30% no llega a desarrollar nunca el temblor.
Además, un 90% de los casos de Parkinson son formas esporádicas, es decir, no se deben a una alteración genética concreta. No obstante, se estima que entre el 15% y el 25% de las personas que padecen esta patología cuentan con algún familiar que la ha desarrollado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Parkinson es el segundo trastorno neurodegenerativo más frecuente, tras el Alzheimer.
Aunque el Parkinson no tiene un tratamiento curativo, el tratamiento persigue mantener o prolongar la funcionalidad del paciente durante el mayor tiempo posible. En este sentido, la estimulación cerebral no invasiva emerge como un tratamiento eficaz y seguro para abordar el Parkinson y otros Trastornos del Movimiento. Esta técnica permite modular la excitabilidad cerebral y hace que determinadas áreas del cerebro que presentan un funcionamiento anómalo puedan normalizar su actividad, reduciendo la sintomatología y manteniéndose sus efectos en el tiempo.
“La estimulación cerebral no invasiva permite reducir los síntomas derivados del transtorno motor del Parkinson y los síntomas asociados de manera significativa y frenar su progresión, mejorando la calidad de vida del paciente de depresión, localizados en distintas regiones cerebrales”, detalla el Dr.Diego Redolar, responsable de la Unidad de Neuroimagen y Neuromodulación del Instituto Brain 360 y profesor de Neurociencias de la UOC.
El Instituto Brain 360 es uno de los principales centros en España en el uso de la estimulación cerebral no invasiva, en combinación con otras disciplinas neurocientíficas, como la psiquiatría, la psicología y la neurología para los trastornos psiquiátricos y neurológicos. El tratamiento está avalado por las principales agencias internacionales de medicamentos, como la FDA (US Food and Drug Administration) y la EMA (Agencia Europea del Medicamento) y avalado por las guías clínicas más reputadas (NICE, CANMAT, NIMH, entre otras).
Entre las ventajas de este tratamiento no invasivo figuran sus escasos efectos adversos y el hecho de que se aplique de forma ambulatoria. La duración media de cada sesión es de unos 45 minutos.