La modalidad de bachillerato a estudiar es el primer paso para moldear su futura carrera formativa y profesional por lo que es fundamental elegir en consonancia con sus habilidades, personalidad y aspiraciones
Cada vez más familias apuestan por el Programa del Diploma del Bachillerato Internacional, un sistema de excelencia académica que permite acceder a universidades de todo el mundo.
Enero es sinónimo de buenos propósitos y también el momento de trazar planes de futuro para muchos jóvenes estudiantes que, quizás, se enfrentan por primera vez a una problemática más propia de la vida adulta. Por eso, esta segunda mitad del curso puede ser un periodo particularmente desafiante para los alumnos, que no solo deben atender a sus quehaceres académicos, sino plantearse qué dirección quieren tomar en su formación y futura carrera profesional.
Una decisión de gran relevancia en la que no solo los jóvenes están involucrados. Todo su entorno jugará un rol determinante en esta primera toma de decisiones, por lo que es necesario entender cuáles son las necesidades del menor y hasta qué punto y de qué manera podemos incidir en este proceso.
"En este momento la labor de padres, orientadores, educadores y profesores es importantísima pues deben dotar a estos jóvenes de las herramientas necesarias para que puedan tomar una decisión meditada y consciente desde el respeto y la libertad. Nuestra labor ha de ser la de escucha activa y el consejo, pero bajo ninguna circunstancia debemos asumir la decisión nosotros mismos o anteponer nuestras preferencias sobre las del joven" afirma Paqui Molinero, Coordinadora de Secundaria y Bachillerato del grupo Brains International Schools, quien además aporta una serie de consejos para lograr superar esta etapa con éxito:
4 consejos para una elección académica acertada
Definir sus prioridades: Las tres preguntas básicas han de ser: ¿qué quiero?, ¿qué se me da bien?, ¿qué puedo hacer? Una vez definidas, estas respuestas pueden ofrecer las primeras pistas hacia donde enfocar su carrera. Entender qué campo es el que dominamos, o en el que nos sentimos más cómodos, puede ser útil para reducir nuestro número de opciones.
Mayor formación, mayor empleabilidad: Las estadísticas señalan que los universitarios aún son el rango de población con mayor empleabilidad. Según datos de la OCDE de 2018, el 81,6% de la población entre 25 y 64 años con formación universitaria española tenía empleo, frente al 69,5% del conjunto de la población.
Escucha activa: Como señalaba Paqui Molinero, la escucha activa juega un papel fundamental en esta labor de asesoramiento de la familia y la comunidad educativa. Conocer las dudas del alumnado, nos permitirá guiarlos en el proceso de hallar las respuestas que ellos mismos necesitan. Pero, sobre todo, nos permitirá mantener a raya miedos e inquietudes que les impiden avanzar en este camino de autoconocimiento.
Asesoramiento e impulso: Invitarles a asumir este periodo como una investigación puede ser el impulso que necesitan. Que se entrevisten con algún profesional con el que comparten vocación, que soliciten asesoramiento por parte del colegio y que analicen las propuestas de las universidades a las que quieren asistir. El grupo Brains International Schools, por ejemplo, realiza este asesoramiento a través de la figura del College Councellor, una orientadora para estudios universitarios que además es miembro del International Association for College Admission Counseling.
El College Councellor traza un plan personal para el alumno a partir de 3° de la ESO, organiza reuniones informativas para padres y alumnos con diferentes universidades y cierra citas individuales con aquellas que son del interés del alumno para que pueda elegir la opción de Bachillerato con criterio y conocimiento de las carreras a las que podría optar, dependiendo de la modalidad de Bachillerato elegido. Esta tarea se refuerza y complementa con la labor que realizan los psicólogos del departamento de orientación, que en 4° de ESO cierran la etapa con una entrevista conjunta familias-alumnos para exponer el informe del Consejo Orientador.
En definitiva, es fundamental que identifiquen los recursos que tienen a su disposición, que los utilicen y que asuman este proceso con responsabilidad y tranquilidad para poder organizar sus ideas y tomar sus propias decisiones.
¿Qué puertas abre cada modalidad de bachillerato?
El primer paso es elegir la modalidad de Bachillerato. Es muy importante elegir una modalidad que vaya en consonancia con las habilidades, personalidad y aspiraciones del alumnado. Tradicionalmente, han existido tres modalidades de Bachillerato que comparten asignaturas troncales como Lengua y Literatura, Inglés o Historia, que se complementan con las asignaturas de modalidad:
Bachillerato de Ciencias y Tecnológico: para alumnos apasionados por las nuevas tecnologías, interesados en campos como la informática o la programación, pero también para quienes busquen una carrera en el ámbito sanitario, científico o de la investigación.
Bachillerato de Ciencias Sociales y Humanidades: esta opción es para alumnos que estén interesados en campos relacionados con la sociedad y el comportamiento humano, desde Economía o Psicología a las distintas Filologías o la Educación.
Bachillerato de Artes: para quienes quieren aproximarse al mundo del arte, en cualquiera de sus vertientes y modalidades, tanto desde una perspectiva práctica como teórica.
Aunque quizá una de las opciones más interesantes y cada vez más demandadas en España sea el programa del Diploma del Bachillerato Internacional, una modalidad que permite acceder a universidades de todo el mundo y ofrece una metodología diferente al plan educativo tradicional en España. El programa dura también dos años y consiste en 6 asignaturas escogidas entre un amplio rango de disciplinas con combinaciones en inglés y español, y también en un tercer idioma.
Además de abrir las puertas a aquellos alumnos que quieran continuar su formación académica en universidades en el extranjero, el programa del Diploma del Bachillerato Internacional es también altamente recomendable para alumnos que deseen seguir formándose en España, gracias a una innovadora metodología que centra sus esfuerzos en el desarrollo de aptitudes, sin duda muy importantes para el alumno en su futura vida académica y profesional. Así pues, los estudiantes tendrán que desarrollar sus propias investigaciones en el currículum académico, hacer un análisis crítico a través de la reflexión de las diferentes formas de conocimiento y participar de actividades y proyectos fuera del aula.
"Es importante elegir la modalidad de bachillerato que mejor se adapte a las habilidades de cada joven. Sin embargo, existe un factor fundamental que en muchas ocasiones tendemos a pasar por alto, y es que, pese a que un alumno tenga grandes capacidades para cierto campo, su éxito radica en la pasión que muestre por éste. Por esta razón debemos dejar que sean ellos mismos los que elijan ese camino que les permita realizarse como individuos y sentir que contribuyen de alguna manera a construir un mundo mejor" concluye Paqui Molinero.