Que los niños colaboren en las tareas domésticas ayuda a fomentar que se conviertan en personas autónomas, empáticas, respetuosas, solidarias, altruistas y responsables. No obstante, no siempre resulta sencillo que obedezcan y que asuman esta cooperación como un plan apetecible y conseguirlo supone un verdadero reto de autocontrol y paciencia para los padres. Desde Nanas & Co, la empresa de selección de personal doméstico referente en su sector, dan una serie de consejos inequívocos para lograrlo
Es importantísimo concienciar a los hijos de que la familia es un equipo, y que ellos deben trabajar para integrarse en él y, para ello, ayudarse mutuamente es fundamental. La familia es el agente de socialización más importante, la responsable de transmitir valores, normas y conductas. Que el niño asuma responsabilidades en las labores domésticas significa también enseñarle a colaborar por un bien común y a aprender el autocuidado y el cuidado de los demás.
Se recomienda comenzar en los primeros años porque es un modo de integrarles en el funcionamiento familiar. De este modo, desarrollarán un sentimiento de pertenencia y aumentará su autoestima. Además, aprenderán a organizarse y a adquirir buenos hábitos de convivencia.
Hay que tener en cuenta el grado de madurez de cada niño. No se pueden pedir tareas que no puedan realizar porque, seguramente, las hagan mal. Hay que observar cómo es cada hijo, si es un niño hábil y ordenado se le puede pedir recoger, ordenar y colocar sus pertenencias. De esta forma, se potencia la confianza en sí mismos.
Hay padres que, para evitar discusiones, prefieren hacerlo ellos mismos y no insistir con los hijos. Ayudar en las tareas de la casa es una labor necesaria y todos deben cooperar. Aunque es más fácil comenzar en la infancia, el adolescente también puede aprender. Hay que enseñarles de forma directa y establecer tiempos límite para cada ocupación.
La mejor estrategia es dar ejemplo. Conviene aprovechar en los más pequeños el poder de imitación hacia los padres. Enséñales cómo se realizan las tareas, supervísale y dale autonomía. Si lo hacen mal, no les riñas y ofréceles ayuda, de lo contrario pueden frustrarse y abandonar la labor. Es recomendable, además, ir incorporando los quehaceres de forma gradual.
Es importante no caer en el error de convertir las tareas en algo negativo, no hay que utilizarlas como castigo.
Cada vez que el niño realice una tarea, después tiene que venir un refuerzo positivo y el reconocimiento de su esfuerzo y participación.
Si hay discusión sobre qué debe hacer cada uno, la solución es negociar una tabla de labores que todos se comprometan a respetar. El aprendizaje y el cambio es posible, pero exige perseverancia, paciencia y constancia.
Cuanto mayor es la implicación de cada miembro en las tareas domésticas, mejores son las relaciones interfamiliares. Al aumentar la participación, se contribuye a la harmonía del hogar.
Que los niños y niñas colaboren en las tareas es decisivo para entender una educación no sexista. No hay que distribuir las actividades en función del sexo de cada hijo y hay que repartirlas aleatoriamente variando semanal o quincenalmente.
Acerca de Nanas & Co
Nanas & Co es una empresa de selección de personal de servicio doméstico, cuidado de niños y mayores, de ámbito nacional e internacional. Seleccionan la persona que mejor pueda ayudarte a cuidar de tus hijos o mayores, y/o realizar las tareas domésticas en cualquier parte del mundo.
Encontrar a la profesional ideal es posible, porque someten a sus cuidadoras a entrevistas detalladas que les permiten encontrar a la persona con más posibilidades de dar respuesta a las necesidades de cada familia.
Profesionalizan los procesos de selección de personal de apoyo doméstico, extrapolando las metodologías y prácticas del headhunting que se aplican en el mundo empresarial.
Emplean un innovador sistema de referencias para que sus embajadoras de reclutamiento garanticen la máxima excelencia. El resultado final son familias contentas y satisfechas.