Tres de cada cuatro aseguradoras incrementarían su cartera de I+D como inversión de impacto social
ICEA, servicio de Estudios del Sector Asegurador Español y organismo encargado de realizar y publicar todas las estadísticas sectoriales, ha presentado hoy 2 de noviembre su estudio "Inversiones en I+D y responsabilidad corporativa".
El estudio, en el que han participado algunas de las aseguradoras más importantes de nuestro país, revela que este sector tiene un alto grado de compromiso social, manteniendo el 85% de las entidades una política activa en materia de responsabilidad corporativa y destinando 112 millones de euros al año a acciones como el mecenazgo cultural, acción social o seguridad vial, entre otras. Además, ocho de cada diez entidades afirman que tienen en cuenta la Agenda 2030 y los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) a la hora de tomar decisiones en este ámbito.
El informe ha sido patrocinado por Kaudal, compañía especializada en la financiación del ecosistema I+D+i en España a través del Mecenazgo Tecnológico, y realiza un análisis exhaustivo del sector, abordando temas como las políticas relacionadas con el medioambiente, la inversión sostenible y la inversión en I+D.
El estudio apunta que la RSC actúa de forma sinérgica con la inversión de impacto social, cuyos objetivos comprenden desde el impulso de la investigación en ciencia y tecnología y la mejora de la vida de las personas hasta el fortalecimiento de la capacidad innovadora del tejido empresarial del país. En este sentido, si observamos las cifras de inversión en el último año, veremos que la inversión de impacto en España creció un 26 % en 2020. Cada vez son más las empresas que tienen muy en cuenta factores sociales, ambientales, de gobernanza y, en definitiva, de impacto social. La inversión en I+D se ha consolidado como una de las vías innovadoras que actualmente genera más impacto social a medio y largo plazo. Sin embargo, en 2019 el 49,1% del gasto en investigación y desarrollo fue financiado por las propias empresas de I+D+i, lo que indica un desconocimiento por parte del sector privado de la existencia de instrumentos que les permitan incluir la I+D en su estrategia y cartera de inversión.
En lo que respecta al sector asegurador, su inversión en I+D es reducida actualmente; siendo el 68,5% de las entidades encuestadas las que invierten en ella menos del 1,0% de su facturación. Como contrapunto, tres de cada cuatro aseguradoras incrementarían su cartera de I+D si conocieran mejor los instrumentos que les permiten adherirse a este tipo de inversión. En este sentido, el 98,3% de las entidades considera que se deberían incrementar los recursos destinados a proyectos de I+D en nuestro país. Sin duda, el sector asegurador como captador de ahorro privado juega un papel decisivo a la hora de financiar e impulsar este tipo de inversiones/proyectos.
Para reflexionar acerca de todas estas cuestiones y poner sobre la mesa los retos y oportunidades del sector asegurador y la importancia de la RSC como activo de valor en una compañía, ICEA, en colaboración con Kaudal, ha presentado los resultados de este informe en un encuentro presencial en la sede de la asociación. Tras la presentación del estudio ha tenido lugar una mesa de debate sobre "Modelos de inversión en I+D+I como impulso de la RSC en el sector asegurador", en la que han participado voces líderes del sector y del ecosistema I+D+i.
“Hay que asumir que cada decisión que tomamos tiene que tener un impacto positivo en la sociedad, eso es algo que el sector asegurador lleva en el ADN y esto se tiene que extender a cómo y en qué invertimos” ha asegurado Ernesto Mestre, subdirector General Financiero y de Riesgos en Mutua Madrileña.
“La RSC mejora la imagen de la empresa y da valor a la entidad, tiene un beneficio colateral porque atrae y retiene talento, fideliza a los clientes, evita riegos reputacionales… Las acciones de RSC dan valor a los mercados”, ha comentado Asunción Martín, socia responsable sector asegurador en PwC Tax & Legal Services.
Alfonso Rosillo, director fiscal en ARQUIMEA, ha afirmado que “la inversión en I+D tiene retornos en lo económico y lo social. Por ello, está alineando los objetivos de política pública y RSC. Es un mecanismo que ha promovido las instrucciones públicas para canalizar capital hacia sectores estratégicos.”
Como contrapunto a la empresa inversora, la compañía Mensoft ha sido representada por su director general Alberto Cabezas, que ha apuntado que “las inversiones en I+D son muy provechosas por la rentabilidad y, además, porque apuestas por ideas y dejas algo a la sociedad. Aunque el proyecto no se termine, la investigación está hecha y alguien podrá aprovechar ese conocimiento y continuarlo.”