Tener un jardín con piscina es el sueño de muchas personas y un lujo nada despreciable. A pesar de ello, es fundamental prestar la debida atención a los aspectos relacionados con la seguridad de este entorno, sobre todo si va a ser frecuentada por niños
Aunque la elección del modelo y los materiales del cerramiento metálico son cruciales, es primordial asegurarse de que son compatibles con la legislación vigente en materia de seguridad.
En particular, es aconsejable prever, desde la fase de diseño, la presencia de mallas metálicas para la piscina que garanticen un nivel adecuado de seguridad para los bañistas de todas las edades.
Valla de seguridad desmontable para piscinas
La elección de instalar un sistema de protección de la piscina permite proteger la seguridad de todos los miembros de la familia, especialmente de los niños, y garantizar la correcta tranquilidad de los adultos. Una buena solución para lograr este objetivo es instalar una valla de seguridad desmontable para piscinas.
Las vallas de seguridad desmontables para piscinas, nacidas en Estados Unidos hace treinta años, son actualmente la solución más popular para los clientes. Está disponible en diferentes soluciones y modelos, estas vallas son capaces de satisfacer múltiples necesidades.
En general, los materiales utilizados para las vallas son los típicos del sector del mobiliario de exterior y, por tanto, extremadamente resistentes: se adaptan sin deformarse a las compresiones, desgarros y a la acción de los agentes atmosféricos. Además, pueden tratarse con estabilizadores de luz UV e inhibidores de moho para garantizar una larga vida en el exterior.
La instalación de algunos tipos de cerramientos metálicos requiere la realización de agujeros en el suelo en los que se insertan los soportes que aseguran la estabilidad y solidez de toda la estructura; otros, sin embargo, no necesitan soportes adicionales pues ya son suficientemente estables. Las vallas móviles para piscinas conllevan varias ventajas, entre ellas:
Seguridad: la instalación de vallas móviles para piscinas permite crear barreras más allá de las cuales los niños no pueden aventurarse, reduciendo, por consiguiente, la probabilidad de que puedan acercarse a la piscina sin la presencia de los padres;
Adaptabilidad: este tipo de estructura es especialmente versátil, ya que puede instalarse en cualquier tipo de jardín, adaptándose a la forma y tamaño de la piscina;
Simplicidad de instalación: el procedimiento de montaje y desmontaje es sencillo e intuitivo;
Volumen mínimo: pueden almacenarse fácilmente en 20-30 minutos y depositarse en otro lugar ocupando poco espacio;
Poco mantenimiento: las cubiertas de piscina móviles requieren muy poco mantenimiento. Basta con garantizar que el entorno en el que se almacenan es adecuado para la conservación del material del que están hechos;
Vallas de madera para piscinas
Las vallas fijas, menos utilizadas que los anteriores desmontables, garantizan la misma seguridad. Si se quiere optar por esta solución es bueno evaluar la ubicación de la piscina, las plantas del jardín y el estilo del paisaje circundante y realzar el jardín con un elemento de diseño, que combine por ejemplo con el cerramiento elegido para la terraza.
Los materiales disponibles en el mercado son numerosos y diversificados, capaces de adaptarse a las diferentes necesidades en materia de vallas fijas para piscinas: de este modo es posible elegir fácilmente la alternativa que mejor satisfaga las exigencias estéticas y prácticas. En cuanto a la elección de los materiales, hay que recordar que, por lo general, las vallas para piscinas son de PVC, aluminio y madera.
Esta última, en particular, es una solución particularmente buena: de hecho, las vallas de madera son adecuadas para muchos contextos, especialmente aquellos en los que la piscina está rodeada de vegetación. El tipo de madera utilizado para fabricar las vallas está tratado con productos especiales que aumentan su resistencia en ambientes exteriores, además de limitar la acción de los agentes atmosféricos, el moho y los insectos.
Por último, hay que recordar cómo este material de alta calidad tiene el mérito de dar comodidad, naturalidad y, obviamente, elegancia a la estructura.
Normativa sobre el vallado de piscinas
¿Por qué optar por cerramientos metálicos de calidad?
Las vallas para piscinas protegen la seguridad de los niños y los animales pequeños sin sacrificar la belleza estética del jardín. Al evitar las caídas accidentales al agua, estas estructuras aumentan el confort de la zona de la piscina y garantizan la tranquilidad de todos los miembros de la familia.
Son muchos los elementos a los que hay que prestar atención a la hora de diseñar una piscina, incluidos los aspectos de seguridad. En particular, la anchura mínima del borde de la piscina y la profundidad máxima, así como la presencia de cualquier ayuda para el acceso al agua, como escaleras o peldaños, son un elemento fundamental para que la piscina se considere "conforme" a la ley.
Con respecto a las vallas de las piscinas conviene recordar algunos de los puntos centrales de la normativa vigente, especialmente para las piscinas que están abiertas al público:
La altura mínima de la valla debe ser de 1 m;
La valla debe ser fácilmente utilizable por todos los usuarios de la piscina;
Es fundamental que la valla de la piscina esté adecuadamente instalada para poder garantizar la correcta estabilidad en caso de necesidad;
Es preferible que el material con el que se fabrica la valla de la piscina sea resistente a los agentes atmosféricos: de este modo se puede reducir la necesidad de sustituirla periódicamente.
En primer lugar, la valla elegida debe estar bien fijada al suelo o a la tierra para garantizar la estabilidad de la estructura.
Altura mínima de la valla de la piscina
Un último aspecto fundamental a tener en cuenta a la hora de comprar e instalar un cerramiento metálico de seguridad, ya sea desmontable o fija, es la altura mínima.
Debe tener al menos 122 centímetros, una altura ideal para proteger a los niños y a los animales pequeños, ya que es un verdadero obstáculo que de ninguna manera se puede eludir o superar trepando.
Cómo mejorar la seguridad de la piscina
Además de las medidas mencionadas anteriormente sobre las vallas de la piscina es conveniente considerar la instalación y el uso de otros dispositivos que pueden mejorar la seguridad en la piscina. En particular, se sugiere considerar la compra de una alarma de piscina para niños.
Se trata de un dispositivo electrónico que vigila la actividad dentro de la piscina gracias a unos sensores y emite un sonido de alarma cuando los niños o los animales entran en la piscina sin permiso. Este sistema se puede activar y desactivar en función de la presencia o no de un adulto que acompañe a los niños mientras están en la piscina, para no correr riesgos y proteger a toda la familia.
Por último, para evitar que los niños se caigan a la piscina cuando no se está utilizando, es posible instalar una cubierta de piscina baja que se puede abrir fácilmente con un motor especial. La mayoría de estos modelos se pueden pisar y, al mismo tiempo, garantizan una resistencia adecuada a la presión y el peso de los niños.