La organiza la Hermandad del Santísimo Sacramento, la más antigua de cuantas existen en Almonacid de Zorita. Los almonacileños esperan que, en 2022, se pueda recuperar la belleza y el esplendor de la procesión del Corpus por las calles de Almonacid, y también que, después de dos años, se pueda engalanar todo su recorrido con los altares que erigen los barrios del pueblo y las alfombras de flores y colores que los unen todos en la que es fiesta declarada de Interés Turístico Provincial
Almonacid Zorita ha celebrado, con una ceremonia únicamente religiosa, una de las fiestas locales más queridas de todo el año, como es la del Corpus Christi. Probablemente, junto al Día de la Virgen de la Luz y la fiesta de los mayos, sea la más sentida por los corazones almonacileños.
Como ya ocurriera en 2020, por la pandemia, en este año 2021 tampoco se ha podido circuir Almonacid de Zorita con las tradicionales alfombras de flores, ni tampoco los barrios han podido erigir sus altares -el Corpus de Almonacid es Fiesta de Interés Turístico Provincial- si bien si ha habido ceremonia religiosa, que organiza, año tras año, la Hermandad del Santísimo Sacramento, el colectivo más antiguo de esta villa alcarreña.
Como corresponde cada año a la Hermandad -cada año a uno de sus miembros, de manera rotatoria- Agapito Magallanes ha erigido un único altar del Corpus, en la entrada principal de la Ermita de la Virgen de la Luz, con los elementos típicos que habitualmente tienen. Tampoco hubo procesión salvo unos momentos, en el interior de la Iglesia, cuando los niños que han hecho la comunión este año, han desfilado por el pasillo de la nave central de la Ermita, con la custodia, protegida por los hermanos, bajo palio.
Especialmente emotivo ha sido el momento en el que José David Magro, de veinte años de edad, nieto del popular 'Pedrin', ha recibido el escapulario de la Hermandad como nuevo miembro. Oficiada por el párroco local, José María Rodrigo, en la ceremonia han estado presentes la alcaldesa de Almonacid, Beatriz Sánchez, y los concejales Jesús Muñoz y Adrián Domínguez.
Beatriz Sánchez deseaba a almonacileños y visitantes un feliz día del Corpus, y le ponía voz a la nostalgia de todo un pueblo. “Esperamos que en 2022 se pueda celebrar este día tan bonito en Almonacid, en todo su esplendor. Damos las gracias a la Hermandad por mantener nuestras tradiciones, y transmitírselas a las nuevas generaciones”, señalaba esta mañana.
Sobre la Hermandad del Santísimo Sacramento
El primer documento que atestigua su existencia data de 1540. De aquel año queda acreditada en el archivo municipal una donación de censos a beneficio de este colectivo.
Sin embargo, el primer libro de la Hermandad que se conserva en la actualidad está fechado en el año 1758. En él se hace referencia a alguno anterior, que se ha perdido. Este documento recoge la celebración anual, y de su texto se deduce la importancia que debió tener la Cofradía porque, según relata, se llegaron a celebrar 'corridas de patos', e incluso 'corridas de toros', que suscitaban el interés de gentes llegadas de otras localidades. Asimismo, el libro da cuenta de que había baile popular, con orquestas y chirimías con motivo del Corpus Christi.
La Hermandad sufrió un bache en la época de la Desamortización de Mendizábal y años posteriores (1834) que condujo prácticamente a su desaparición. Sin embargo, se retomó el culto al Santísimo Sacramento, que llegó hasta la Guerra Civil. El pueblo de Almonacid de Zorita quedó enclavado en zona republicana, de manera que muchas de las reliquias que había en las iglesias fueron destruidas. De nuevo comenzó un periodo de sombra para la Cofradía que se prolongó entre los años 1936 y 1962. Fue entonces cuando siendo párroco local Epifanio Herranz, y con Manuel Toledano Parra como uno de los principales valedores, cuando se abrió un libro nuevo de la Hermandad y se reinició el culto al Santísimo Sacramento. La Hermandad se ha mantenido, de manera ininterrumpida, hasta la fecha, con el añadido posterior, en los años setenta, de las alfombras que unen todas las calles de la procesión y sus altares. En la actualidad, es el hijo de Manuel Toledano Parra, Manuel Toledano Fernández, quien ocupa la presidencia de la Hermandad.