Para ayudar a entender y decidir qué carpintería es más adecuada para el hogar entre la ventana de PVC o la de aluminio, es necesario detallar las respectivas características
En realidad, es difícil dar una respuesta clara a la pregunta: ¿ventanas de aluminio o de PVC?
La elección y la decisión dependen de las necesidades y deseos, pero también del presupuesto. A continuación, se explican las ventajas de cada una de ellas en este artículo.
Hay muchas opciones para la carpintería exterior: madera, aluminio, PVC, etc. Cada uno de ellos tiene propiedades diferentes, pero también sus propias ventajas e inconvenientes.
Así que, para elegir la mejor opción en ventanas hay que tener en cuenta que la carpintería debe estar acorde a la estética de la vivienda y al presupuesto.
Renovar las ventanas ¿Qué material elegir?
¿Cómo elegir entre una ventana de aluminio, madera o PVC?
Las ventanas modernas son muy similares entre sí. Comparten muchos de los mismos componentes, independientemente de que la ventana tenga un marco de PVC, de madera o de aluminio.
La mayoría de las carpinterías de aluminio utilizan multimateriales, por lo que el acristalamiento, las juntas y los herrajes suelen ser los mismos por razones de industrialización de los procesos de producción. También comparten acabados y aspectos similares.
- El PVC imita a la madera gracias a láminas decorativas similares a las utilizadas para los muebles y los suelos laminados.
- La madera esta revestida con lacas plásticas blancas, grises o beige que limitan el mantenimiento y el aluminio comparte con el PVC acabados mates, granulados, cobrizos o metálicos gracias a lacas y láminas de acabado.
Finalmente, las líneas redondeadas y rectas, los montajes a 45° o 90° de los marcos son factibles con todos los materiales antes mencionados.
Entonces, ¿Cuáles son las diferencias entre las ventanas de aluminio y las de PVC?
PVC, madera o aluminio: ¿qué ventana es más aislante?
Las ventanas son una parte importante del aislamiento de una casa. Es importante, porque la carpintería antigua puede ser responsable de entre el 10 y el 25% de la pérdida de calor, según el año de construcción de la vivienda.
El rendimiento térmico de las ventanas va a depender de los elementos que componen la ventana y, en particular, del rendimiento del acristalamiento y del marco.
Las superficies respectivas de cada uno son importantes. En los grandes formatos, predomina el rendimiento del acristalamiento, ya que representa la mayor superficie de la ventana. Sin embargo, también compiten cada vez más con las puertas correderas de PVC, que tienen perfiles cada vez más finos y con mejores prestaciones de aislamiento.
¿Cómo funciona?
De hecho, los fabricantes aplican a la carpintería moderna las fórmulas que han hecho triunfar la unión del aluminio y el PVC. Cuando el marco de PVC se refuerza con acero o aluminio para ganar en rigidez, los perfiles de aluminio se embarcan en el núcleo de los disyuntores térmicos de PVC.
Por lo tanto, cuanto más reforzada con metal esté la ventana de PVC, menos aislante será y, por el contrario, cuantas más barras o un núcleo termoplástico importante tenga el marco de la ventana de aluminio, más aislante será.
La superficie acristalada también es importante porque favorecerá los aportes de energía solar y la luz.
Al maximizar los aportes solares y luminosos, se limita el consumo de energía para calentar o iluminar las viviendas. Sin embargo, en este caso, es importante instalar una protección solar desmontable. De lo contrario, se corre el riesgo de tener demasiado calor en verano y de utilizar el aire acondicionado.
PVC o aluminio: ¿qué ventana es más elegante?
Cuando se trata de la estética, el aluminio es la primera opción. Con sus perfiles delgados y líneas limpias, su gama de colores, es una gran opción para quienes desean un interior moderno y contemporáneo.
Sin embargo, el PVC ha roto su imagen de "perfiles anchos y poco atractivos" creando nuevos acabados para ofrecer líneas esbeltas, modernas y de diseño.
Con aspectos metálicos, acabados en negro mate, gris liso o estriado, rojo o imitaciones de madera, el PVC ofrece múltiples posibilidades de acabado.
PVC o aluminio: ¿qué ventana es más fácil de mantener?
Es conveniente conocer los aspectos a tener en cuenta para elegir una ventana de bajo mantenimiento. Buenas noticias, ¡este es el caso de ambos materiales! A diferencia de la madera, que hay que repintar, teñir o barnizar con regularidad, el PVC y el aluminio no requieren ningún mantenimiento.
PVC o Aluminio, la vida útil de referencia es la misma, entre 30 y 50 años. No se trata de una vida útil global, sino de una vida funcional estimada, durante la cual se supone que aportarán comodidad y protección contra las inclemencias del tiempo.
Hay ventanas de PVC que tienen más de 50 años o ventanas de aluminio con rotura de puente térmico que tienen más de 40 años. Con un mantenimiento regular, no han perdido su calidad. El mantenimiento también es el mismo.
Para que las ventanas conserven su brillo y evitar que la contaminación o la suciedad se depositen y se incrusten, se pueden limpiar las ventanas dos veces al año con agua jabonosa.
En caso de manchas persistentes, se deben seguir las recomendaciones de la guía de mantenimiento de las ventanas. Dependiendo del acabado, los productos a utilizar pueden ser diferentes.
Además, cada 2 años, se recomienda comprobar el aspecto y el funcionamiento, así como lubricar los herrajes.
Si la principal preocupación es el mantenimiento, ambos productos, son de buena calidad y darán plena satisfacción.