Una singular obra enciclopédica dirigida por Ramón Úbeda, ilustrada por Antonio Solaz y publicada por La Fábrica.
Cada silla cuenta su propia historia y en la Sillipedia caben todas, incluso aquellas en las que el diseño no es lo fundamental.
La Sillipedia es un proyecto promovido por Andreu World que comenzó a gestarse hace un lustro, con aportaciones de escritores e historiadores sobre el tema de la silla, para contribuir a difundir su historia y su cultura de una forma más amena y menos académica.
Es un proyecto abierto que no se acaba aquí y podrá tener continuidad en el futuro.
Se materializa por primera vez en este libro publicado por la prestigiosa editorial La Fábrica con motivo del 65º aniversario de la empresa valenciana.
Una recopilación de anécdotas y relatos alrededor de la silla escritos por veinte autores que conocen bien sus historias: María José Balcells, Santi Barjau, Isabel Campi, Guillem Celada, Daniel Cid, Ana Domínguez, José María Faerna, Albert Fuster, Marisa García Vergara, Daniel Giralt-Miracle, Rosina Gómez-Baeza, Pilar Mellado, Oriol Pibernat, Mónica Piera, Isabel del Río, Patricio Sáiz, Carmen Sevilla, Rosalía Torrent, Ramón Úbeda y Mauricio Wiesenthal.
Un libro ilustrado con 101 ilustraciones, 21 retratos y 245 dibujos de sillas realizados por Antonio Solaz, utilizando diferentes estilos y recursos gráficos.
Cada silla nos cuenta su propia historia y aquí caben todas. Incluso aquellas en las que el diseño no es lo fundamental. Suman ciento y una, pero podrían haber sido muchas más. Mil y una sillas sería el horizonte soñado para esta singular obra enciclopédica.
La silla da para mucho porque es la pieza reina de la historia del mobiliario y esa historia se puede explicar con el mismo rigor que otras que ya se han escrito, pero con una mirada más abierta y plural, con aportaciones de un buen número de especialistas, todos ellos acreditados historiadores del diseño, de la arquitectura o del arte, de diferentes generaciones y orígenes geográficos.
Con ello no hemos querido sentar cátedra, sino aprender de los que más saben y compartir ese conocimiento con los lectores. Los títulos de los capítulos en los que hemos organizado el contenido dan otra pista sobre el carácter de esta publicación. La selección de las historias es subjetiva, hemos escogido unas, pero podrían haber sido otras, porque hay muchas más. Utilizar ilustraciones en lugar de fotografías para acompañarlas ha sido también una decisión deliberada y un trabajo enorme para Antonio Solaz, que ha tenido que multiplicarse técnicamente para no aburrir.
Le hemos dado libertad total para interpretar los escritos con la confianza de que el resultado fuera realmente un libro ilustrado, en la forma y también en la función, como dicen los bauhausianos que tienen que ser las buenas sillas y como las fabrica Andreu World desde hace sesenta y cinco años. Su historia es la última, pero también podría haber sido la primera.