Innovación, optimización y eficiencia serán claves para la supervivencia en un sector en el que peligran más de 55.000 empleos, según la CETM
La paralización de la economía derivada del estado de alarma ha supuesto para el transporte de mercancías por carretera una fuerte caída de actividad, especialmente dura para los autónomos y pymes con pequeñas flotas de vehículos. De cara a su recuperación económica, será clave para ellos la integración de tecnologías de optimización de rutas y gestión de cargas, que les permitirán aprovechar al máximo las oportunidades de negocio y la capacidad de sus vehículos. Así lo asegura Ontruck, plataforma online de transporte de mercancías por carretera, quien considera que éste puede ser el momento clave para dar un paso adelante en el proceso de digitalización de los autónomos y pymes del sector.
“Tecnologías como las que integra nuestra plataforma permiten a los transportistas acceder a un mayor volumen de cargas y obtener más ingresos, optimizar los trayectos que realizan y ahorrar costes, hacer seguimiento en tiempo real de su flota de vehículos e introducir mejoras en la gestión de su propio negocio, como la digitalización de los albaranes o la autofactura", señala Muriel Moscardini, General Manager de Ontruck en España.
El comienzo de la crisis llegó a suponer que se quintuplicara la demanda de transporte de empresas del sector asociadas a productos de primera necesidad. La desescalada, sin embargo, traerá consigo una reactivación más bien lenta, según las previsiones de Ontruck, vinculada a las fases y marcada por la apertura y reinicio de la actividad por territorios. Todas estas fluctuaciones hacen imprescindible incorporar a las empresas herramientas que ayuden también a flexibilizar sus servicios para adaptarse mejor a entornos que, en el medio plazo, seguirán siendo muy cambiantes.
Tecnología para minimizar los riesgos
Según datos de la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), la crisis provocada por el COVID-19 ha supuesto para el sector una reducción media de actividad del 43%, llegando al 59% en el caso de los autónomos y al 48% las empresas de menos de 20 vehículos, lo que se traduce en más de 55.000 empleos que se encuentran actualmente en peligro de desaparecer.
Ante esta complicada situación, la tecnología ofrece tres claves que pueden contribuir a la recuperación del sector del transporte tras la crisis:
- Innovación: La automatización de procesos permite que la transmisión de datos y de información crítica del negocio se realice de manera digital, lo que facilita que se agilicen los procedimientos y al mismo tiempo redunda en una reducción de costes.
- Optimización. A través de estas plataformas tecnológica es posible absorber los incrementos de demanda sin tener que aumentar el número de vehículos, lo que hace, a su vez, que los transportistas realicen más servicios y generen más ingresos. En definitiva, este sistema permite gestionar volúmenes muy altos y responder con mayor flexibilidad a fluctuaciones del mercado como las experimentadas durante la crisis.
- Eficiencia. Un transporte por carretera más eficiente no sólo consigue eliminar costes asociados en combustible, sino que además genera un menor impacto ambiental, pues al eliminar los kilómetros realizados en vacío se reducen también la emisión innecesaria de gases contaminantes a la atmósfera.