Las iniciativas novedosas también incluyen una evaluación a fondo de los efectos de la dana sobre el empleo del Mar Menor, y la introducción de las 'competencias blandas' en la orientación a desempleados

La realización de sendos estudios para detectar las necesidades formativas de la población de la comarca del Mar Menor y para conocer en profundidad los intereses profesionales de las mujeres en puestos de trabajo tradicionalmente masculinizados son algunas de las nuevas medidas acordadas hoy por la comisión de seguimiento trimestral de la Estrategia por el Empleo de Calidad 2017-2020.

Dicha comisión estuvo presidida por el consejero de Empleo, Investigación y Universidades, Miguel Motas, y contó con la participación de los tres directores generales de este departamento en materia laboral, así como de representantes de la patronal Croem, y de los sindicatos UGT y CCOO. Esta estrategia actúa como hoja de ruta del Gobierno regional en el ámbito del empleo, e incorpora periódicamente nuevas iniciativas que pueden dinamizar el mercado de trabajo en la Región.

El estudio para detectar las necesidades formativas de la comarca del Mar Menor permitirá identificar carencias que pueden dificultar la recualificación de la población del entorno tras la dana del mes de septiembre, de forma que cualquier actuación en materia de empleo en la zona vaya acompañada de una formación específica de la población potencialmente beneficiaria.

Por su parte, el estudio sobre profesiones tradicionalmente masculinizadas avanzará en el conocimiento de los intereses y motivaciones de las mujeres respecto a estos perfiles laborales, que presentan una baja representación femenina. Ello servirá para diseñar acciones que reduzcan la brecha salarial y fomenten la igualdad, sobre todo en el campo de la formación profesional. De esta manera, se incentivará la igualdad entre hombres y mujeres.

La comisión también decidió la incorporación de otras dos acciones, una de las cuales es la realización de una evaluación a fondo de los efectos de la dana sobre el empleo en el Mar Menor. Así, se realizará un informe que determinará de manera precisa los efectos sobre el empleo, con especial incidencia sobre los sectores económicos más afectados, y que servirá para dimensionar las actuaciones a desarrollar en la zona.

La cuarta y última iniciativa activada por la comisión es la introducción de las denominadas 'competencias blandas' en los itinerarios de orientación laboral de las Oficinas del SEF. De esta manera, se potenciará el desarrollo de competencias personales que son cada vez más valoradas por las empresas, como la empatía, el trabajo en equipo, la resiliencia, la creatividad y el respeto por la diversidad.

Como parte del proyecto europeo 'Ícaro', el SEF desarrolló una herramienta de valoración de estas competencias, que puede utilizarse para un mejor conocimiento del perfil de las personas desempleadas que son atendidas en los servicios de orientación. Esta medida permitirá delimitar con mayor precisión las necesidades de la persona desempleada, y redundará en una prestación de servicios más eficaz e individualizada.

Cumplimiento de objetivos

La comisión también fue informada sobre el cumplimiento de los dos objetivos principales del Gobierno regional en materia empleo para 2019, que son alcanzar al cierre del año una tasa de paro del 14,90 por ciento (actualmente es del 14,16 por ciento) y llegar a los 615.000 trabajadores ocupados (a día de hoy son 618.100). Por tanto, ambas metas ya se están cumpliendo y mejorando.

Miguel Motas destacó que "estamos cumpliendo los objetivos marcados, y por ejemplo somos la comunidad líder en creación de empleo, pero eso no quiere decir que no debamos seguir trabajando intensamente para mejorar el empleo en la Región. Las nuevas medidas introducidas van en esa dirección, y se centran específicamente en dar respuestas a la situación de la comarca del Mar Menor y en promover la igualdad".

Proporción de medidas ejecutadas

La Estrategia, que ha contado con un presupuesto de 74 millones de euros en 2019, ya ha activado el 97 por ciento de las medidas previstas desde su puesta en marcha tres años atrás. A finales de 2016, la tasa de desempleo de la Región era del 19,75 por ciento, el 'peso' de los desempleados sobre la población activa ha caído en este periodo en más de cinco puntos.