La empresa murciana, que sigue trabajando con normalidad en el país galo, y así lo hará durante los próximos años, sigue esperando a que se pronuncien los órganos comunitarios superiores.

Hay que destacar que si bien la sentencia francesa no es ejecutiva, y seguiremos defendiéndonos los próximos años ante los juzgados comunitarios superiores, en todo caso llegado su momento será una cuestión a resolver entre Francia y España

"Este es un tema político entre los gobiernos español y francés, que deberán resolver entre ambos", manifiestan desde TERRA FECUNDIS, tras ser anunciada hoy la cuantía civil fijada por los tribunales franceses por el supuesto impago de cotizaciones en Francia de personal agrícola empleado en suelo galo durante cuatro años.

Desde TERRA FECUNDIS señalan que las cantidades que reclama la administración francesa ya fueron pagadas en España en tiempo y forma, en los términos fijados por la normas comunitarias de coordinación de los sistemas de seguridad social. "Nosotros siempre hemos cumplido escrupulosamente con la normativa española, francesa y comunitaria. Si los órganos judiciales europeos en los próximos años finalmente ratificasen oficialmente en última instancia esta decisión, deberá ser el Estado español quien abone cualquier cantidad a Francia, ya que no es posible a una empresa pagar dos veces en dos países distintos", indican desde la firma murciana.

Esperando a Europa

"Esta sentencia no añade absolutamente nada nuevo", declaran desde la empresa, donde recuerdan que la sentencia no es ejecutiva. "Seguimos esperando a que se pronuncien los órganos comunitarios superiores, lo cual es de esperar que aún pueda demorarse años", destacan, al tiempo que remarcan que siguen trabajando con total normalidad en Francia, y así lo harán en los próximos años, cumpliendo en todo momento con la legislación comunitaria, que será la que tenga la última palabra sobre este asunto.

"Francia cuestiona sistemáticamente los derechos nacionales contrarios a sus intereses, pero ningún país puede estar por encima de la legislación europea", concluye la empresa murciana, que quiere mandar un mensaje tranquilizador a sus clientes.

"Nuestros servicios en territorio francés siguen operativos con total normalidad. Siempre hemos cumplido con la ley y legamente haremos todo lo necesario para que así se reconozca, y evitar así un nuevo atropello del país galo, en este caso a España, como ya han venido realizando estos últimos años a otros países comunitarios", subrayan.