El Colegio Carlos V, ubicado en la localidad murciana de Águilas, se ha convertido en todo un referente en sostenibilidad y ahorro en la Región, siendo pionero en el uso de almacenamiento de energía fotovoltaica -baterías- dentro del ámbito educativo, logrando reducir a cero su consumo de energía de la red eléctrica durante sus horas lectivas. El centro tiene entre sus principales líneas de enseñanza la innovación, el uso de la tecnología y la sostenibilidad medioambiental.
Este colegio se sitúa a la vanguardia nacional en el uso de almacenamiento de energía siendo, además el primero en la Región de Murcia, en apostar por este tipo de alternativas limpias. La instalación de autoconsumo, desarrollada por la empresa Cubierta Solar, dispone de 47,88 KWp con un sistema de almacenamiento con baterías de 90KWh. Tecnología innovadora y en vías de generalizarse tras la aprobación este año de la Estrategia de Almacenamiento Energético.
Esta mañana se ha inaugurado la instalación con la presencia de Fulgencio Perona, director general del Medio Natural; Francisco Victoria Jumilla, jefe del Servicio de Fomento del Medio Ambiente y Cambio Climático; Desiderio Navarro Aragoneses, concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Águilas y otros miembros de la Corporación Municipal; Luis Navarro, gerente de Cubierta Solar y varios presidentes de las cooperativas de diversos municipios importantes de la Región.
La planta comenzó a funcionar en los meses de verano, en los que se han registrado las mayores subidas del precio de la luz, multiplicando su ahorro gracias a la combinación de panales solares y la puesta en marcha de 18 unidades de baterías, que permiten almacenar energía y utilizarla cuando no está produciendo la fotovoltaica.
De hecho, el colegio durante sus horas lectivas se nutre única y exclusivamente de energía fotovoltaica y la almacenada en sus baterías, tiene cero consumos de la red durante el día, evitando así hacer gasto cuando la energía es más cara (P1). Carga las baterías con excedentes de la fotovoltaica y de la red en período valle, cuando la electricidad es más barata. Por lo tanto, el colegio comienza el día con energía almacenada y en cuanto sale el sol se nutre de la fotovoltaica; el excedente no consumido pasa a las baterías.
Gracias a la implantación de este sistema de almacenamiento, este centro educativo, se ha convertido en todo un referente de una de las tecnologías que permitirán más ahorro, sostenibilidad y un retorno de la inversión más temprano a quienes las pongan en marcha. Es, por tanto, este colegio, un ejemplo de anticipación y rentabilidad, ante el inestable mercado eléctrico.
La instalación fotovoltaica, obra de la empresa Cubierta Solar, está formada por 114 paneles solares Canadian Solar con un total de 47.88 kWp de potencia. Gracias a ella, podrá evitar la emisión de 40,48 toneladas de CO2 al año, el equivalente a más de 4.000 árboles.
Con esta medida, esta sociedad cooperativa de enseñanza podrá obtener importantes ahorros gracias al aprovechamiento de la energía del sol; se calcula que ahorrará 8.800 euros al mes en una factura eléctrica, que, en las circunstancias actuales, no para de subir.
"Las energías verdes son nuestro presente y nuestro futuro, su uso se hace necesario por varias razones, la obvia que es la necesidad de disminuir nuestra huella de carbono y frenar el cambio climático en el que estamos inmersos, pero también la necesidad de abaratar costes, sobre todo en un momento en que la factura eléctrica no deja de subir y fluctuar sin permitir una planificación. El autoconsumo con almacenamiento de baterías nos permite aprovechar una energía limpia y gratuita como es la solar en cualquier momento, disminuyendo el uso de energías fósiles. Ha permitido que este colegio sea pionero, un colegio con consumo cero que va a ser referente", ha comentado Luis Navarro Buciega, gerente de Cubierta Solar.
"El gran problema medioambiental que tenemos es el cambio climático y este colegio es un ejemplo de cómo luchar contra él con las energías renovables y como trabaja por la descarbonización. Los mejores portavoces que puede tener la lucha contra el cambio climático son los niños y estoy seguro de que lo llevarán a sus casas. Enhorabuena por este acierto", ha comentado Fulgencio Perona, director general de Medio Natural de la Región de Murcia.
Por su parte, Desiderio Navarro Aragoneses, concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Águila, ha manifestado que este colegio es un "ejemplo para cualquier centro educativo o empresa de un sistema de ciclo cerrado, y no sólo eso, es una oportunidad educativa, los alumnos van a ser multiplicadores de estas acciones contra el cambio climático".