Las previsiones de menor crecimiento de la economía se mantienen para 2020, aunque ya se empiezan a notar algunos síntomas que apuntan a una recuperación de la actividad en la mayoría de las regiones españolas en 2021. Así se recoge en el Observatorio Regional de BBVA Research correspondiente al primer trimestre de 2020. El mayor dinamismo de la demanda externa, principalmente europea, así como el avance de la inversión favorecerán el cambio de tendencia del crecimiento regional, que estará liderado por las comunidades del centro y sureste. Con todo, la actividad podría tender hacia un menor dinamismo que antes de la crisis.BBVA Research mantiene para 2020 un escenario de menor crecimiento que en 2019, que en líneas generales no supone cambios en cuanto a qué comunidades serán las más dinámicas. Así, el crecimiento en 2020 continuaría liderado por Madrid (+2,3%), Castilla-La Mancha (+1,9%) y Navarra (+1,9%). A estas, según el último Observatorio Regional, se suma Extremadura (+1,9%), debido al repunte de la inversión y el impulso fiscal experimentado en 2019. Por el contrario, Baleares, Asturias y Canarias, con crecimientos del 1,3%, 1,2% y 1,1%, respectivamente, se situarían en la cola del crecimiento.
Para 2021, las previsiones apuntan a que Madrid, Castilla-La Mancha y Murcia podrían presentar los mayores crecimientos, con tasas por encima del 2%. Sin embargo, Asturias, Castilla y León y Extremadura serán las regiones menos dinámicas. No obstante, el Servicio de Estudios de BBVA prevé para las comunidades insulares una mayor aceleración de su actividad, apoyada por las mejores perspectivas de crecimiento de los países europeos, que favorecerá la recuperación de la demanda de servicios turísticos.
La desaceleración podría tocar fondo en 2020
Las regiones del centro y sureste continuarán liderando el crecimiento regional en los próximos trimestres. El repunte del consumo interno, observado a finales de 2019, apoya en mayor medida a Madrid y la costa mediterránea. Asimismo, la mejora de la inversión en maquinaria y equipo de los últimos años podría favorecer el dinamismo de comunidades como Murcia o Navarra, así como apoyar el avance de la industria en Galicia, Cantabria, La Rioja o la Comunidad Valenciana. Por el contrario, la falta de recuperación de las inversiones en Castilla y León afecta especialmente a su actividad por su elevada exposición a la producción industrial.
Finalmente, ya a finales de 2019 se notaron las primeras señales de mejoría de las exportaciones en algunas comunidades del centro-norte, lo que empujaría el avance de la producción industrial. A medida que la recuperación de la demanda externa de bienes y servicios, principalmente de países europeos, se generalice, sus primeros efectos sobre la actividad se observarán ya a lo largo de este año.
Incertidumbre interna y externa
El escenario de recuperación previsto para 2021 podría verse afectado por diversos factores de incertidumbre.
En el entorno global destacan las tensiones comerciales entre EE.UU. China y la Unión Europea, además del ‘brexit’. Aunque en ambos casos el riesgo es ahora menor, los efectos son heterogéneos. Así, el elevado peso de las exportaciones afectadas por los aranceles podría condicionar la evolución de La Rioja, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia. Por otro lado, la menor probabilidad de una salida desordenada de Reino Unido de la Unión Europea podría repercutir en Canarias y Baleares, dado el peso de los turistas británicos sobre la actividad de estas comunidades.
En todo caso, el gasto turístico de los extranjeros en España sigue mostrando una evolución positiva, que se apoya en el avance del turismo urbano (con mayor gasto medio por turista y día). Cataluña, Madrid, la Comunitat Valenciana o incluso, recientemente, algunos puntos de las islas Baleares, se habrían visto favorecidas por este avance. Por el contrario, la atonía del turismo de playa (de menor gasto diario por turista) y especialmente, las dificultades en Canarias a finales de 2019 (problemas financieros de touroperadores, disminución del número de plazas de avión disponibles) explican la disminución de las pernoctaciones de extranjeros.
A todo lo anterior, se añaden los efectos negativos de los cambios regulatorios sobre el sector del automóvil y el inmobiliario. En el sector automotriz tanto la compra como las exportaciones siguen evolucionando a tasas negativas. Así, las caídas en las ventas al exterior de coches en Cataluña, País Vasco, Galicia, Castilla y León y Madrid habrían superado las aportaciones positivas de Navarra, Aragón y la Comunidad Valenciana. No obstante, a medida que la demanda europea se recupere, se debería observar una mejora del sector. En relación al sector inmobiliario, los datos disponibles muestran que las transacciones de vivienda siguen por debajo del nivel alcanzado antes de los cambios regulatorios en el mercado hipotecario. La progresiva absorción de los efectos de la regulación debería contribuir al repunte del sector desde finales de año y sobre todo en 2021. Esto favorecería a Madrid y la costa mediterránea.
Por último, la velocidad de la recuperación dependerá de las políticas que se implementen durante los próximos meses y de los cambios que el nuevo Gobierno pueda introducir en ámbitos tan importantes como el mercado laboral o las pensiones, así como para reducir el desequilibrio en las cuentas públicas.