Si hay algo que diferencia a los buenos jugadores de los muy buenos es la capacidad para ganar cuando no estás bien y no te encuentras cómodo en pista. Esto es algo en lo que Carlos Alcaraz se maneja como un auténtico veterano a pesar de contar con solo 18 años, y hoy lo volvió a demostrar ante Pierre-Hugues Herbert.

El francés es un tenista más acostumbrado a la modalidad de dobles, pero su peculiar repertorio también tiene la capacidad de enredar partidos cuando juega en individuales. Si a esto le sumamos que el español venía de competir en Viena y que apenas había entrenado en las canchas parisinas, todo ello representaba una prueba que no iba a ser nada sencilla para Carlos.

La seguridad en el saque fue la dinámica de los primeros cinco juegos. Ambos jugadores sacaban con buenos porcentajes de primeros servicios y los puntos apenas tenían recorrido.

Sin embargo, todo iba a cambiar en el juego siguiente, porque varios segundos saques del galo provocaron que el palmareño pudiera presionar más al resto, y de esta forma, materializar el primer break de la tarde. Pese a esta situación, el murciano regaló un nuevo break merced de varios errores infantiles.

Durante el resto de la manga alternaron errores tanto al saque como al resto, pero como ninguno de los dos fue capaz de definir; el tie-break decidiría el vencedor del parcial. Dos errores de Alcaraz y un Herbert que apenas concedió un punto al resto, fueron suficientes para que el tenista local se adjudicara el primer set.

Mentalidad de crack

El reciente semifinalista en Viena no estaba encontrando buenas sensaciones, y esto lo sabía su oponente, que aprovechaba dicha coyuntura para ponerle en aprietos y avivar sus dudas.

Un aspecto en el que Carlos destaca por encima del resto de jóvenes del circuito, es de la mentalidad. Para avanzar en París tenía que resetear su cabeza y empezar a cambiar la dinámica del choque. Y aunque el español salió tras el descanso del set con una marcha más, de nuevo la irregularidad de ambos mantuvo las tablas en el marcador: la muerte súbita dictaría justicia.

En dicho juego el francés comenzaría ganando 2-0, pero un increíble Alcaraz supo sacar su mejor tenis para sumar siete puntos seguidos y mandar la contienda a la tercera manga. Una vez más había conseguido jugar a su mejor nivel cuando más lo necesitaba.

Faltaba culminar la remontada, algo que sería una ardua misión debido a la agresividad de su contrincante, que además se veía cerca de lograr lo que hoy en día es una victoria de prestigio.

De nuevo la igualdad fue notoria a lo largo del último parcial. Las alternativas eran continuas y en prácticamente todos los juegos se avistaban oportunidades de quebrar el saque contrario.

Por otro lado, el pupilo de Ferrero se sentía con más confianza y daba muestras de poder dar un golpe sobre la mesa en cualquier momento. Esa ocasión llegó cuando la precipitación y las dudas del alsaciano con el servicio pusieron el 2-4 a favor del murciano. No obstante, el guión del encuentro siguió su curso y Herbert devolvió el break tras un pésimo juego de su adversario.

Parecía que íbamos destinamos a un nuevo tie break que decidiera quién seguía en el torneo, pero un gran Alcaraz al resto junto con los nervios del francés al saque, terminaron de decantar la balanza para el jugador nacido en 2003.

Sinner será la siguiente amenaza

Después de un día difícil, su próximo rival será una gran piedra de toque pese a tratarse tan solo de una segunda ronda. Estamos hablando de Jannik Sinner, un italiano que con 20 años ya es top 10, y que junto a Carlos, es uno de los llamados a dominar el mundo del tenis en los próximos años. El partido lo pondrán visualizar en el canal de Movistar #Vamos a partir de las 17:00.