DATOS Y CITAS:

Cortesía de Wikipedia.

Takht-e Rostam.

Takht-e Rostam es un monumento del siglo VI a. C., situado a medio camino entre Persépolis y Naqsh-e Rostam en Fars, en Irán.

Se trata de una tumba inacabada que data de la época aqueménida que habría sido una copia exacta de la de Ciro II en Pasargadas. Solamente subsisten las dos plataformas inferiores. Se estima que estaba destinada a Cambises II, pero éste murió prematuramente en Siria, su lugar de inhumación permanece desconocido.

El nombre moderno significa «el trono de Rostam», y hace referencia a Rostam un héroe mítico de la antigua Persia.

La tumba fue encontrada en la década de 1930 por el arqueólogo Ernst Herzfeld.

Veamos: Sobre este lugar no hay mucha información, pero se viene a decir lo mismo. Como sabemos la ciencia oficialista solo ve en estas inexplicables construcciones; o tumbas o templos, jamás verán tecnología.

Lo que ocurre es que son las piedras las que nos están hablando, para lo que nos basta con ver las imágenes aportadas y teniendo en cuenta los datos que se han dado en esta serie de artículos.

Lo primero que vemos en estas extrañas construcciones es que están sin terminar de construir. Pero lo que más destaca son las marcas de impactos de rayos que hay, tanto en la plataforma circular, como en la casa que hay encima.

Como vimos en los primeros capítulos de la ciudad perdida de Petra en Jordania, que se trata de una extensión de 264.000 m2 en la que la roca madre donde están esas portadas tiene una forma reblandecida, que no deja dudas a que en una época tuvo una consistencia blanda y puesto que es ahí donde están las portadas, está claro que se ablando la roca para construir las portadas. Pero esto no solo ocurre en Petra; sino que también en Capadocia que está en Turquía. Y se trata de una circunferencia de 50 Km. de diámetros que coge porciones de cuatro provincias de Turquía central, donde la forma reblandecida de las rocas y las construcciones está muy clara.

Pero es que esto ocurre en todo este tipo de construcciones inexplicables que están por todo el mundo. Es decir: Todo este tipo de construcciones que la ciencia oficialista dice que son tumbas o templos, se estaban construyendo en todo el mundo y puesto que todas están sin terminar de construir. Está claro que se estaban construyendo al mismo tiempo y también que se aborto la construcción en todas ellas en el mismo instante.

El motivo por el cual se aborto la construcción en todo este tipo de construcciones ya lo hemos visto en anteriores capítulos y provoco que los verdaderos constructores ya no estén entre nosotros.

Como estas construcciones inexplicables se estaban construyendo con una tecnología que tal vez este un millón de años por delante de nuestra tecnología actual. Los verdaderos constructores las inutilizaron con el fin de que no resultásemos heridos o muertos cuando ellos se marchasen y nosotros entrásemos en ellas, pues todavía no aprendimos nada de su enorme saber.

Se han detectado unas pocas maneras de inutilizar estas construcciones que como ya hemos visto en realidad son maquinas: Abortando apenas comenzada la construcción, enterrándolas, partiendo las piedras, partiendo las piedras y volándolas, rompiendo los mal llamados sarcófago que en realidad son cavidades resonantes muy sofisticadas, ablandando otra vez la construcción para deformarla, dirigiendo una tormenta de rayos hacia estas construcciones.

Esto lo vimos por primera vez en la llamada puerta de los Dioses en Perú, en un extraño rebaje de forma circular que hay en mitad de la puerta. Y después se vio en la llamada puerta del templo en Sacsayhuaman que está en Perú y en todas las piedras que conforman este lugar que tiene tres filas de enormes piedras, con una longitud de 400 m., cada una que hacen zig zag.

Donde se vio que estaba plagado de impactos de rayos. Pero esos impactos solo estaban en las piedras de Sagsayhuaman y no en las enormes rocas de diorita que hay a pocos metros de estas piedras. Lo que quiere decir que esa tormenta de rayos fue dirigida a las piedras de Sagsayhuaman y no se trato de una tormenta natural.

Estos impactos de rayos están en muchos de los muros de estas inexplicables construcciones que están por todo el mundo. ¡Incluso en el coliseo romano! ¡Y en Stonehenge, el famoso conjunto megalítico del sur de Inglaterra!

Y desde luego también en Takht-e Rostam, esto puede verse muy bien en las imágenes aportadas. Lo que quiere decir sin lugar a dudas, que esta construcción es una más de las innumerables que se estaban haciendo en este planeta por parte de esa civilización humana que vino de las estrellas a este planeta a dejar su ADN, su civilización y su cultura. Dejo su ADN, que somos nosotros, pero que por las razones ya consideradas en capítulos anteriores no pudo terminar lo que vinieron a hacer.

Ante todo esto tengo que decir, que si en la Biblia no se menciona nada de esto, no es porque ninguno de sus autores lo desconociera, ya que la iglesia católica me consta que conoce lo del ablandamiento de rocas y generación de formas, tal como vimos en el capítulo de la montaña de Montserrat en Barcelona.

Pero no quiere decirlo tratando a la humanidad como a niños y haciendo un acto de soberbia de proporciones bíblicas.

Es por tanto la iglesia, al menos en su área de influencia, la entidad que está detrás de la infantil línea editorial de toda la ortodoxia, la que maneja los hilos y la que dicta lo que hay que decir.

Aunque como sabemos se dice lo mismo en todos los países donde están estas enigmáticas construcciones, que en realidad no tendrían que estar ahí porque ninguna generación anterior a nosotros las pudo construir.

Y no porque exista un complot de todas las religiones, sino porque la versión que nos llega a nosotros es la de la ortodoxia nuestra. Y no las distintas versiones, mitos o leyendas que corren por los demás países y que los investigadores ortodoxos desprecian.

Rafael Alfonso Alfaro García