El drama indaga sobre la trastienda de la operación que organizó el diplomático Ángel Sanz Briz para salvar a 5.000 judíos de su asesinato por los nazis en la Segunda Guerra Mundial
La editorial Artezblai ha publicado 'Budapest. Un silencio atronador' del dramaturgo navarro Víctor Iriarte, obra que fue galardonada el pasado 22 de diciembre con el prestigioso Premio Lope de Vega de Teatro que convoca el Ayuntamiento de Madrid. El texto está ya a la venta en la Librería Yorick.
‘Budapest. Un silencio atronador’ es un drama que pone el acento en los claroscuros de la ambiciosa operación puesta en marcha desde la Legación española en Budapest en 1944 para salvar la vida a cerca de 5.000 judíos que estaban condenados a una muerte segura por los nazis alemanes y húngaros en el último año de la Segunda Guerra Mundial. El papel del diplomático zaragozano Ángel Sanz Briz resultó clave en la estrategia urdida, basada en mentiras, medias verdades y sobreentendidos, una apuesta de enorme riesgo que logró engañar a los responsables de la deportación a Auschwitz de la población judía budapestina. El diplomático, en paralelo, incumplía las directrices que emanaba el Gobierno español desde Madrid, en ese momento aliado del Tercer Reich.
La operación de rescate, en la que participaron decisivamente otros embajadores de países neutrales (Suecia, Suiza, Portugal, la Nunciatura del Vaticano y la Cruz Roja Internacional) presenta todavía zonas de sombra, pues sorprendentemente Sanz Briz jamás contó en vida los detalles de la operación, ni presumió de su acción, permaneciendo mudo hasta su muerte en Roma en 1980. Ello da pie al dramaturgo a imaginar cómo pudo llevarse a cabo esa estrategia, que por momentos alcanzó tintes de epopeya.
El drama, que parte de 30 años de lecturas del autor sobre lo sucedido en Budapest, “una auténtica obsesión”, según ha confesado, se empezó a escribir en 2010 y necesitó de 19 borradores hasta llegar al texto definitivo, premiado con el Lope de Vega de Teatro por ser “una ambiciosa propuesta en la que el dramaturgo logra recrear una época turbulenta y convulsa en la que tuvo lugar lo peor y lo mejor del ser humano. Con una estructura clásica y muy bien armada, este emotivo texto se sirve del teatro para dar a conocer al público una historia llena de horror que no debe olvidarse”, según indicó el jurado en su fallo, que estuvo integrado entre otros por el director adjunto del Teatro Español de Madrid, Luis Luque, y los periodistas culturales Rocío García (El País), Alberto Ojeda (El Cultural de El Mundo) y Paloma Cortina (Radio Nacional de España). El texto fue seleccionado en la edición que ha batido el récord de participación de la historia del certamen, con 233 textos procedentes del Estado español, México y Argentina.
'Budapest. Un silencio atronador' es una obra ambiciosa, estructurada en tres partes y un epílogo que, en una representación convencional, podría alcanzar una duración cercana a las 6 horas. Por la obra desfilan 14 personajes principales, otros 35 con papel y una veintena de episódicos. El propio autor aparece como personaje en la obra trasladando a la escena los recursos de la narrativa de autoficción para, en un esfuerzo de honestidad, aclarar al lector (y al posible público de una representación) los hechos reales de los ficcionados por él. Así mismo, la edición de Artezblai añade un prolijo apéndice en el que el autor da cuenta de los aspectos más controvertidos de la historia y las soluciones adoptadas durante su largo proceso de escritura.
En el prólogo, el autor y director teatral Carlos Be afirma: “la paleta con la que escribe Víctor Iriarte contiene todos los colores del teatro y los mezcla con amor, devoción y sabiduría. Sin trazas, residuos o contaminación. Y permitidme que enumerando todo lo que no es esta obra, diga todo lo que es. No es una obra oportunista, ni envanecida, ni deshonesta, ni terapéutica, ni ordinaria, ni chaquetera, ni aprovechada, ni vendida, ni comprada, ni demagógica o dogmática, ni autoprogramada, ni aduladora, ni enferma, ni moribunda, ni deshabitada, ni fatua, ni pedante, ni encopetada, ni narcisista, conveniente, infantiloide o mediática, ni pasada de moda por querer marcar la moda, ni propia de letraheridos con síndrome de rana hervida, ni una obra que sueña con ser largometraje o serie de plataforma, ni siquiera aburrida hasta decir basta, ni fea; porque además es entretenida –y mucho- y bella. Y también es todo lo demás que no he citado. Porque es teatro. Y porque escribir esta obra es amar el teatro. Una epifanía digna de un orfebre de la palabra y la escena”.
Víctor Iriarte (Pamplona, 1965)
Se dedica profesionalmente al periodismo, la crítica teatral y la gestión cultural. Como autor dramático, ha obtenido el Premio Nacional de Teatro Calderón de la Barca 2006 por ‘La chica junto al flexo’ (Madrid, Centro de Documentación Teatral, 2007) y (Alzira, Algar Editorial, 2014) y el Premio Café Bilbao de Teatro Breve 2010 por ‘La esquela’ (Bilbao, Artezblai, 2012). También ha publicado ‘Import-Export’ en ‘El tamaño no importa. Teatro breve juvenil 9’ (Madrid, Ediciones Antígona-Asociación de Autores de Teatro, 2019). Ha subido a los escenarios 24 dramaturgias. Sus obras ‘¡Chssssss!’ (2005) y ‘Cuota líquida’ (2007) han sido traducidas al inglés, y ha sido representado en el Reino Unido con los títulos ‘Wheesht!’ (2005) y ‘Limbo’ (2008). Imparte historia del teatro y de la puesta en escena en programas para alumnos senior de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) y la UNED. Ha ejercido la crítica teatral en el periódico Diario de Noticias de Navarra y conduce desde 2004 el programa sobre las artes escénicas ‘El apuntador’ de Onda Cero de Navarra. Es autor de la edición y prólogo de ‘Patxi Larrainzar. Teatro de agitación (Tafalla, Txalaparta, 2019), que reúne seis textos del dramaturgo navarro más importante de la Transición.
Con la obtención del Premio Lope de Vega de Teatro 2019 (la convocatoria arrastra un año de retraso), Víctor Iriarte entra en un palmarés en el que están, entre otros, Alejandro Casona, Antonio Buero Vallejo, Jaime de Armiñán, Ignacio Amestoy, Fernando Fernán-Gómez o Narciso “Chicho” Ibáñez Serrador.