El próximo día 15, festividad de la Asunción de la Virgen, la patrona de Sevilla y la Archidiócesis, la Virgen de los Reyes, estará en el presbiterio bajo, delante, incluso del altar del Jubileo de la Santa Iglesia Catedral. Para la ocasión, lucirá el manto de la coronación, obra de los talleres de Olmo y diseñado por Herminia Álvarez Udell. Esta magnífica pieza fue donada por la Condesa de Casa Galindo.
Sin duda, es una de las grandes joyas del bordado en el siglo XX. Está realizado en hilo de plata sobre tisú celeste y es uno de los mantos de mayores dimensiones del amplio ajuar que posee Nuestra Señora de los Reyes, debido a los ricos dibujos que provoca el estilo «regio» de la pieza. Su última restauración se realizó en 2004 por el taller de sucesores de Elena Caro. La Virgen y el Niño lucirán las coronas de salida.
Ya esta misma tarde, con ocasión del último día de la novena consagrada en su honor, la imagen de la Patrona abandonará las alturas del Altar del Jubileo y aparecerá en la misma ubicación que ocupará mañana, más cerca de los fieles: «en el suelo del Altar del Jubileo, sentada en su sillón de besamanos, que es el antiguo de salida, y perfumada con varas de nardos», que como cada 15 de agosto colocará la floristería Ramitos, encargada desde «hace más de ochenta años» de exornar el paso de la Patrona. Este año también para ellos será diferente.
.. La imagen también aparecerá engalanada ya esta tarde con el manto y los atributos que lucirá mañana en la solemnidad de la Asunción, incluida la valiosa corona de salida, obra del joyero Pedro Vives en 1904, y el pecherín de brillantes. De ello se habrán encargado las peculiares camareras de la Virgen, las Hermanas de la Cruz, que, a primera hora de esta tarde, en una ceremonia íntima, mudarán el atuendo que ha lucido la Patrona de Sevilla durante la novena por la vestimenta que le hubiera correspondido en la salida procesional, es decir, el manto celeste que estrenó en diciembre del año 1904 con motivo de su coronación canónica. Se trata de una pieza de tisú en tono celeste bordado en plata por el taller de Olmo según un diseño de Herminia Álvarez Udell. Fue donado por la condesa de Casa Galindo y su estreno se produjo durante el triduo preparatorio para la imposición de la presea que tuvo lugar los primeros días de diciembre de aquel 1904.
Este año, todas las colectas de la novena que está predicando Antonio Jesús Rodríguez Báez, párroco de la Asunción de Osuna y vicario de la zona sur -incluida la extraordinaria de ayer día 13-, se dedicarán a los comedores sociales de la Archidiócesis, toda vez que la pandemia ha traído también consigo una importante crisis económica y se han disparado los usuarios de estas instalaciones benéficas.
Fotos Antonio Rendón Domínguez