Cuando nos aproximamos a otro 8 de marzo, día de las mujeres, desde Podemos-Cieza se lanza un mensaje claro y rotundo a la sociedad ciezana: si sigue siendo necesaria la celebración de esta efeméride es porque estamos aún muy lejos de alcanzar los fines que le dan razón de ser.

En opinión de María Jesús Fernández Ortiz, miembro del Consejo de Coordinación local, en un momento en el que la pandemia parece encontrarse en franca regresión, "es hora de hacer balance sobre lo que ha supuesto la Covid-19 para la lucha de las mujeres por su plena igualdad con los hombres". Y la conclusión no es halagüeña, "ya que se constata que, como consecuencia de la pandemia se han producido retrocesos en algunas materias clave como el empleo femenino, la violencia de género o la corresponsabilidad", lo que vuelve a situar en primer plano la necesidad de seguir profundizando en las políticas de igualdad. En palabras de esta portavoz, "se vuelven a abrir las brechas que tan solo habíamos empezado a cerrar y no es posible, hoy, negar el impacto de género de esta crisis sanitaria".

Acompañando a este impacto, y como resultado del auge de los neofascismos, "ha aumentado el ruido de las voces anacrónicas pero aún muy escuchadas que intentan banalizar o incluso criminalizar las luchas y las consignas del feminismo", que buscan desprestigiar a este movimiento y a sus propuestas de transformación social.

Frente a este "rumor de las cavernas", María Jesús Fernández sostiene que se debe responder "como siempre lo hacemos las mujeres, en positivo". Para ello, explica que es preciso hablar de un feminismo centrado en la realidad material de las mujeres, "en lo que son y en lo que sienten las mujeres", sin que sea admisible un solo paso atrás.

De un feminismo para todos y que nos hace mejores a todos, "a hombres y a mujeres, pues solo en un ámbito de igualdad mujeres y hombres podrán dar lo mejor de cada uno".

De un feminismo transformador, "que no se conforma con el rol del eterno Pepito Grillo y que pretende cambiar, de verdad, el mundo".

Un feminismo, en suma, "que aporta fundamentos solidarios para una sociedad más libre, más democrática y con más esperanza, pues el feminismo no puede ser visto por nadie como una amenaza, sino que es, en realidad, una oportunidad para que todas las personas puedan vivir mejor".

Desde Podemos-Cieza entienden que hay más razones que nunca para celebrar el 8-M, pero, al mismo tiempo, que "esta celebración ha de tener como objetivo el trascenderse a sí misma, porque la aspiración de la que nace solo quedará satisfecha cuando todos los días del año sean el día de las mujeres y el día de la igualdad; cuando todas las mujeres seamos sujetos de todos los derechos, todos los días; y cuando estos no sean meros derechos nominales, sino derechos reales y efectivos, encarnados y realizados en la cotidianeidad de todas las mujeres".