El portavoz de Medio Ambiente de los ecosocialistas ciezanos, José María Rodríguez, muestra su preocupación por el estancamiento de la COP26 en la creación del mercado internacional de carbono o la dotación de fondos para la adaptación de los países en desarrollo, así como en los escasos avances en justicia climática y financiación para países vulnerables.
IU-Verdes de Cieza se ha hecho eco de los cálculos de la Organización Mundial de la Energía, que apuntan a que en 2021 se está dando un rebote de las emisiones de CO2 provocadas por la obtención de energía. En este sentido, su portavoz de Medio Ambiente, José María Rodríguez, ha declarado que se calcula que al final de año el total de emisiones de CO2 podrá estar 33 gigatoneladas, solo un poco por debajo de las 33,4 de 2019, justo antes del parón por la pandemia de COVID-19.
En declaraciones a los medios, Rodríguez ha mostrado su preocupación por el hecho de que en la Cumbre del Clima -COP26-, que se ha venido celebrando en Glasgow, no se haya avanzado "hacia un modelo energético diferente", en el que se descarte "reforzar el uso de la energía nuclear como energía de transición". Su portavoz de Medio Ambiente, José María Rodríguez, recuerda que el planeta superará en solo 11 años el límite de emisiones de CO2 que marca una catástrofe medioambiental.
Por otra parte, el portavoz ha recordado que los trabajos en este foro internacional vienen precedidos por la decisión que tomaron hace unos días los Estados que integran el G20 -incluido España- para fijar un tope de subida de la temperatura del planeta de 1,5 grados, "una decisión de mínimos que difícilmente se va a alcanzar en la práctica", ya que "no se trata solo de acordar este límite, sino de traducirlo en políticas y en acuerdos concretos".
Para IU-Verdes de Cieza aunque COP26 de Glasgow ha conseguido tímidos avances en capítulos como la deforestación, el metano o la eliminación progresiva del carbón, no ha logrado un sólido acuerdo para conseguir la reducción de emisiones con un escenario de aumento máximo de las temperaturas de 1,5 grados, ni tampoco ha logrado alcanzar la meta de 100.000 millones de dólares anuales de financiación internacional, pospuesta al menos dos años.
Por otra parte, el portavoz ha recordado que Oxfam Intermón ha denunciado la desigualdad en las emisiones de carbono, ya que el 1% más rico del planeta lanza más CO2 que el 50% más pobre. En este sentido, ha incidido en las grandes diferencias en las emisiones de carbono entre la población según su renta: la ONG calcula que los más ricos tendrían que reducir su consumo un 97% y propone subir impuestos al lujo en forma de yates o aviones privados, o incluso prohibirlo.
Rodríguez ha concluido mostrando su coincidencia con Luis Arce, presidente legítimo de Bolivia, quien ha resumido la cumbre y la urgencia de actuar diciendo: "La solución a la crisis climática no se logrará con más 'capitalismo verde', o más mercados globales de carbono. La solución es un cambio de civilización, para avanzar hacia un modelo alternativo al capitalismo".