El pasado jueves, la sede de Podemos en Cartagena sufrió un nuevo ataque por parte de exaltados que no entienden el significado de democracia. No es la primera vez que se da esta circunstancia en el local morado de la ciudad portuaria. En mayo ya rompieron varios cristales con piedras y en septiembre el local fue objeto de pintadas amenazantes con simbología neonazi. Esta vez, han ido más allá, intentando incluso incendiar la sede con cócteles molotov, algo que podría haber causado una auténtica desgracia humana y no solo daños materiales. Todo se resume en dos palabras: violencia ideológica. Una violencia basada en el odio y en el miedo a otras culturas, a lo nuevo, a lo diferente o a lo que no son como ellos.
Desde Podemos Cieza advierten que no pueden dejarse intimidar por tal cúmulo de barbaridades antidemocráticas y que estos ataques "solo reafirman su buen hacer integrador ante la intransigencia". Maribel Aguayo, portavoz local de Podemos, apuesta por "construir la solidaridad y la fraternidad desde los pueblos y desde los barrios", y ha recordado que desde esa sede se ha estado ayudando "a cientos de personas con los trámites del Ingreso Mínimo Vital, de manera desinteresada y por parte de voluntarios y voluntarias del círculo de Cartagena". En su opinión, eso es precisamente "lo que le duele a los violentos de ultraderecha, la concordia, el respeto a otras culturas y la solidaridad entre iguales, valores todos incompatibles con su ideología". "Nosotras creemos que, ante la razón de la fuerza violenta de unos, Podemos siempre apostará por la fuerza de la razón de los valores humanos que toda persona de bien entiende y defiende.", afirma Maribel Aguayo.
Para Podemos Cieza los ataques violentos a la sede de Podemos de Cartagena no se pueden permitir en una sociedad libre, tolerante, respetuosa y en convivencia. Por lo tanto, toda fuerza política democrática tiene y debe posicionarse en contra de actos violentos de semejante calado, debiéndose sumar de inmediato y con total rotundidad a la condena de tan tristes, violentos y antidemocráticos hechos perpetrados en nuestra vecina localidad de Cartagena. Pues…sobran los motivos.
