El concejal de Consumo, Sanidad y Salud Pública del Ayuntamiento de Cieza destaca que la medida "está avalada por la OMS como una política muy rentable porque permite incrementar la salud de la población al tiempo que reducir el coste sanitario de las enfermedades relacionadas con un consumo excesivo de azúcar".
Según un comunicado, "el gobierno ha anunciado que subirá el IVA a las bebidas azucaradas desde el 10% actual al 21%, lo que ha desencadenado toda una ola de apoyos pero también de críticas. Por un lado, está quienes consideran que esta medida contribuirá a mejorar la salud de la población y por otro lado, aquellos que creen que esta medida es puramente recaudatoria y que afecta negativamente sobre todo a la gente que tiene menos renta".
Así, el concejal de Consumo, Sanidad y Salud Pública del Ayuntamiento de Cieza, Francisco Saorín, ha recordado lo "nocivo" que es para la salud el azúcar añadido en general y las bebidas azucaradas en particular; "un consumo que la OMS asocia al sobrepeso y a la obesidad, lo cual es especialmente preocupante en el caso de los niños. A su vez este sobrepeso y esta obesidad son factores de riesgo de sufrir enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, que es la primera causa de muerte en el mundo y en nuestro país, la diabetes, los trastornos en el aparato locomotor y algunos cánceres".
"Acorde a los datos de Sanidad, en España uno de cada dos adultos comprendido entre los 25 y 65 años tienen un peso superior a lo recomendado, lo que supone que, en comparación con Europa, España se sitúa en una posición intermedia en relación con el porcentaje de adultos obesos. Pero en lo que se refiere a la población infantil nuestro país presenta unos porcentajes muy elevados en comparación con Europa, de las cifras más altas solo comparables con algunos países mediterráneos", ha precisado el concejal.
"Por otra parte, según la OCDE la obesidad absorbe uno decada 10 euros destinados al presupuesto sanitario español. Por lo tanto, todo esto supone un grave problema de salud, pero también económico porque atender este tipo de enfermedades derivadas del sobrepeso y de la obesidad absorbe muchísimos recursos públicos", ha subrayado Saorín.
El edil ha explicado que, "teniendo en cuenta que el consumo de bebidas azucaradas está asociado a una mayor probabilidad de sufrir este tipo de enfermedades, constituyendo un problema muy importante en España, el Ministerio de Consumo ha iniciado una campaña agresiva de concienciación para que la gente sepa lo nocivo que es el azúcar añadido y decida en consecuencia reducir su consumo".
Saorín ha incidido en que "aunque desde Consumo se está promoviendo un etiquetado sobre los productos para que los consumidores como desaludables o no son ese tipo de productos, la información no suele ser suficiente para modificar los hábitos de consumo, por eso también se va a incrementar el IVA de las bebidas azucaradas que actualmente está en el 10%, lo que no tiene ningún sentido porque la mayoría de los productos está gravado al 21%".
"No se trata de una idea novedosa, ya que hay 27 países en el mundo que han introducido un impuesto a las bebidas azucaradas y los resultados de estas experiencias nos confirman que ha disminuido considerablemente el consumo de bebidas azucaradas, que ha mejorado la salud de la población incrementando su esperanza de vida, especialmente en las familias de menor renta, y que ha reducido el coste sanitario", ha declarado el edil.
Saorín ha querido dejar claro que esta medida "no tiene pretensión recaudatoria por dos motivos principales: porque al hacer una campaña agresiva en contra del consumo de las bebidas y otros productos azucarados lo previsible es que elconsumo total disminuya, con lo cual si esto ocurre también disminuirá la recaudación; y porque no hay ninguna necesidad de recaudar más porque Bruselas ha permitido que hasta el año 2022 cualquier país, incluido el nuestro, pueda tener todo el déficit público que necesite en un momento de pandemia".
"En resumen esta medida de incrementar el IVA a las bebidas azucaradas está avalada por la OMS como una política muy rentable porque permite incrementar la salud de la población al tiempo que reducir el coste sanitario de las enfermedades relacionadas con un consumo excesivo de azúcar", ha concluido.