La Concejalía de Medio Ambiente ha contribuido este miércoles a la celebración del Día del Árbol promoviendo una serie de actividades de concienciación sobre la importancia de los bosques destinadas a centros escolares, entre las que se encuentran juegos didácticos, talleres o la plantación de árboles en los huertos escolares de los colegios San Bartolomé y San José Obrero.

Estas actividades promovidas por el Ayuntamiento de Cieza se han agrupado en torno a la fecha proclamada por la Asamblea de las Naciones Unidas como Día Forestal Mundial según ha recordado el concejal de Medio Ambiente, Antonio Moya.

La mañana ha comenzado en las instalaciones del Colegio San Bartolomé-La Era donde se ha querido aprovechar el huerto escolar existente en el patio de infantil para plantar árboles y hortalizas con la ayuda de los alumnos del centro.

Aquí se ha realizado una serie de juegos didácticos a cargo de monitores de la Asociación Sociocultural La Casa Azul en los que han participado una treintena de alumnos de primero y segundo de Primaria.

El concejal de Medio Ambiente, que ha estado acompañado por el director del centro Manuel Salmerón, ha explicado que su área municipal "ha plantado más de 400 árboles con la ayuda de asociaciones y colectivos locales para recuperar el bosque de ribera".

Mientras tanto, en el Colegio San José Obrero y con la implicación de Medio Ambiente, se han realizado actividades similares a través de las cuales se ha resaltado el valor de los árboles y los bosques, así como la responsabilidad de su cuidado y conservación.

A través del lema de este año, 'Los bosques y las ciudades sostenibles: vivamos en ciudades más verdes, saludables y felices', se pretende resaltar la importancia de los árboles y bosques desde distintos puntos de vista, ya sea como almacenes de carbono que ayudan a mitigar los efectos del cambio climático, como fuentes de alimento y medicinas o como fuentes de energía y de riqueza.

De la misma forma, se pone en valor la importancia de los bosques como elementos que fomentan estilos de vida activos y saludables, mejoran la salud mental, previenen enfermedades y proporcionan un lugar para que las personas socialicen, así como ser reductores de la contaminación acústica, ya que protegen las casas de las carreteras y áreas industriales cercanas.

También se destaca su labor como filtradores de aire que contribuyen a que la ciudadanía pueda disfrutar de un aire más limpio en las ciudades, sin olvidar el punto de vista como protectores de las cuencas hidrográficas o como hábitat y protección para numerosos animales y plantas.