Por la dignidad del Efesé y el cartagenerismo, Orgullo Cartaginense apoya la concentración contra la directiva

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El club está condenado a su desaparición si no se libera de Belmonte y su entorno

Por la dignidad del Efesé y el cartagenerismo, Orgullo Cartaginense apoya la concentración contra la directiva

El Efesé no puede ser durante más tiempo una sucursal del Real Murcia

Orgullo Cartaginense, peña con más de 15 años de antigüedad e incondicional apoyo a nuestro Fútbol Club Cartagena, manifiesta su total apoyo a la concentración anunciada para el próximo miércoles - que ya cuenta con la aprobación de la Delegación del Gobierno para su realización-, a las 19:30 horas, previa al encuentro entre el Efesé y el Elche CF, en la que se reclamará la salida de la directiva de la entidad bajo el lema #FueraDeCarthago.

Respaldar esta acción reivindicativa es una obligación moral para una asociación, Orgullo Cartaginense, que siempre se ha distinguido por la defensa de la dignidad de nuestro club y del cartagenerismo. Prueba de ello fue el rechazo frontal que mostramos, allá por 2015, cuando el presidente del club y, entonces, proclamado como nuevo dueño de la entidad, Francisco Belmonte, planteaba la desaparición del Efesé y el traslado de otro club de la Región a nuestra ciudad.

Ahí se sentaron las bases de una relación basada en una entrega incondicional y servilismo de todo el entorno del Cartagena a Francisco Belmonte, sin el más mínimo atisbo de crítica.

Casi diez años después sufrimos a un presidente que desprecia abiertamente a la afición, en especial, a sus abonados (recordemos la rueda de prensa en la que calificaba de payasos las voces críticas, faltas de respeto en entrevistas, menosprecio sobre la importancia de la aportación económica de los abonados, etc.), que ha perpetuado la opacidad y la soberbia como seña de identidad, que ha puesto en riesgo la estabilidad económica presente y futura (a pesar de batir todos los registros en número de abonados, ingresos por televisión, etc.), y cuya falta de capacidad de gestión ha convertido al Cartagena, casi cinco años después de su ascenso, en el club con menos recursos de la Segunda División.

La deriva del club es absoluta. No existe futuro con ellos. Un mínimo análisis no deja lugar a dudas. Una plantilla del primer equipo con el menor número de fichas profesionales de toda Primera y Segunda División, una cantera con pésimos resultados y ningún fruto que malvive en recintos municipales como Ciudad Jardín o San Ginés, mientras proyectos propios como el de San Antón quedan en el cajón de olvido sin que nadie pida explicaciones, una Ciudad Deportiva de La Manga Club que ha quedado inacabada, una situación de desapego con la sociedad cartagenera alarmante, caída de patrocinadores, un proyecto empresarial como el Business bajo mínimos, un Estadio Cartagonova, que en algunos aspectos resulta tercermundista, la existencia de unos parámetros económicos de club camino de la desaparición, etc.

Todo ello, además, con una gestión que, además de ineficaz y ahogada por falta de financiación, depende directamente, para sonrojo de todas las instituciones futbolísticas que miran para otro lado, del dueño de otra SAD, Felipe Moreno, del Real Murcia.

Así, sufrimos la vergüenza de que los supuestos intentos de compra del club tengan que recibir el visto bueno - o no - del inversor mayoritario de nuestro máximo rival, convirtiendo al FC Cartagena en una especie de colonia de un club de inferior categoría, ahogando nuestro crecimiento y privándonos de la mínima autonomía. 

Esta situación, que ha sido silenciada vergonzosamente durante años, ha terminado por explotar y ser determinante para nuestra deriva actual. Por ello, el FC Cartagena no puede permanecer ni un día más en manos de Francisco Belmonte, Felipe Moreno, y todo ese entorno cuyo único objetivo parece ser el de liquidar a nuestro club para despejar, más aún, el camino del Real Murcia.

Reclamamos, y esperamos contar con el respaldo del resto de la masa social en esta tarea, que se vele por la claridad y transparencia en el supuesto proceso de venta anunciado en los medios de comunicación, siendo necesario verificar por qué dicha intención de compra tiene como representante a un antiguo empleado de Felipe Moreno en el Real Murcia, con inversor desconocido, al tiempo que Belmonte y Breis anuncian que seguirían en el nuevo proyecto para lo que llaman una “transición ordenada”.

Ni Cartagena como ciudad, algo en lo que el Gobierno local deberá pronunciarse, ni los aficionados del Efesé, podemos permitir que se nos haga el truco del ‘tocomocho’, dejando todo como está, únicamente para allanar el camino de Felipe Moreno ante el CSD y la LFP.

Tomando prestado el tema de Sabina, en Orgullo Cartaginense no tenemos ninguna duda: “Nos sobran los motivos” para decir bien alto, Belmonte, Breis, Moreno, Duino, Carreño, y todo lo que huela a ellos, #FueraDeCarthago.

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