Coincidiendo con las Jornadas Diocesanas de Hermandades y Cofradías que se celebraron ayer domingo en Cartagena, la copatrona hizo un recorrido por el casco, en el que estuvo acompañada por vecinos y cofrades, culminando en una misa en el puerto

La Virgen del Rosell, copatrona de Cartagena, salió ayer domingo en procesión, un hecho excepcional que coincidió con la celebración en la ciudad de las XII Jornadas Diocesanas de Hermandades y Cofradías, que congregaron a miembros de cerca de sesenta cofradías de toda la región, unas 1.500 personas.

El encuentro comenzó con una acogida en el atrio principal de la Plaza del Ayuntamiento de Cartagena, el acto de Bienvenida y Oración, que contó con la presencia del concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Francisco Espejo, y un saludo por parte de la alcaldesa, Pilar Barreiro, y representantes de Cofradías y Hermandades.

Tras este saludo, los presidentes de los Cabildos o Juntas Centrales de las distintas poblaciones realizaron la firma en el Libro de la Peregrinación, dando seguidamente paso a la Procesión Jubilar de Cofradías, que salió de la Iglesia de Santa María, con una comitiva encabezada por el piquete de batidores de la Cofradía del Resucitado.

Las distintas cofradías participantes se organizaron para la procesión por orden alfabético de poblaciones, portando cada una un cartel en el que anunciaban la población y sus distintos estandartes. La procesión contó también con la Banda de Cornetas y Tambores Bahía de Cartagena de Torreciega.

Cerrando el desfile, el trono de la Santísima Virgen del Rosell, portado por cien personas en cuatro turnos y acompañado por la banda de música Sauces. También el Piquete de la Sección de Honores de los Granaderos Californios, de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús en el Prendimiento, escoltó a la virgen con su banda de tambores y cornetas.

A mediodía, tras la llegada de la procesión a la Plaza Héroes de Cávite, se celebró una eucaristía presidida por el obispo de la Diócesis, José Manuel Lorca Planes, que estuvo acompañado por el Coro Polifónico Jesús Prendido de la Cofradía de los Californios. La alcaldesa, Pilar Barreiro, también asistió a la misa, acompañada por varios ediles de la corporación municipal.

La jornada finalizó con una Comida de Hermandad en el restaurante El Paraíso.