Cartagena (Murcia), 15 dic (EFE).- El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Gerardo Díaz Ferrán, ha dicho hoy en Cartagena que 2010 "será un año complicado si no se ponen en marcha las propuestas y reformas que llevamos un año pidiendo al Gobierno".
Díaz Ferrán, que ha asistido a una reunión de la comisión ejecutiva de la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM), ha afirmado que el desempleo crecerá en 2010 y que España "seguirá por debajo de un punto en el PIB" si no se pone en marcha una reforma laboral.
El presidente de la patronal española ha dicho que el Gobierno ha perdido un año y que, por tanto, "lo que haya que hacer hay que hacerlo con urgencia".
Ha asegurado que la CEOE no se ha levantado de la mesa de negociación y que están dispuestos a seguir en el diálogo social con sindicatos y Gobierno a partir del próximo enero, tal y como ha propuesto el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
Gerardo Díaz Ferrán ha afirmado que "es un comienzo" que el presidente ya se haya referido a una reforma laboral, a lo que ha añadido la necesidad de una reforma fiscal que permita ganar competitividad a las empresas españolas.
El responsable de los empresarios españoles ha expresado la necesidad de "no perder la velocidad de otros países de Europa como Francia y Alemania que en el cuarto trimestre del año han abandonado la recesión".
También ha considerado que si no se aplican las reformas que propone la CEOE la crisis será "más prolongada y penosa" en España.
Díaz Ferrán, al igual que hizo ayer en la Conferencia de Presidentes, ha hecho un llamamiento a las Comunidades Autónomas para que pongan en marcha políticas activas de empleo y ha pedido a todas las administraciones públicas "que paguen a los empresarios".
Al respecto, ha dicho que la deuda actual de las administraciones públicas con las empresas alcanza los 22.000 millones de euros, y ha reiterado el problema que representa este impago, al que hay que sumar la falta de crédito de muchas empresas. EFE