A menos de un año para que arranque el V centenario del nacimiento de Santa Teresa y cuando se espera que al menos la Iglesia y parte del Monasterio se abra al público el próximo mes de febrero, lamentamos y denunciamos tanto la falta de conservación del edificio como el expolio del que ha sido objeto.
El mes pasado tuvimos conocimiento de que con motivo de la reciente cesión por un año al Ayuntamiento del Monasterio de las Madres Carmelitas, los técnicos municipales se habían percatado de que han desaparecido o han sido dañadas importantes partes y piezas del catálogo del Monasterio de San José de las Madres Carmelitas Descalzas, si bien esto ya fue denunciado por este Grupo Municipal por primera vez en escrito de febrero de 2013, tanto al Ayuntamiento como a la Dirección General de Bienes Culturales. Concretamente pedíamos: "Que se certifique qué piezas del citado catálogo están en su lugar, su estado de conservación y cuales faltan, con la adopción en su caso de las medidas que procedan para su restitución, que se permita la visita pública al menos cuatro días al mes, y que se haga cumplir a la propietaria sus obligaciones de mantenimiento y conservación según lo previsto en la Ley de Patrimonio", pues teníamos constancia de que faltaban, entre otras cosas, las puertas del retablo mayor y de que había problemas de filtraciones y humedades por mal estado de las cubiertas.
En informe de la visita que realizó la citada Dirección General, a resultas de nuestra denuncia, a principios de junio de 2013 solamente se destacó los problemas que habían en las cubiertas, si bien la empresa no ha realizado ninguna de las medidas que se le indicaban ni se le volvió a requerir para ello.
Lo que ahora se ha confirmado según el informe emitido en la visita del pasado mes de diciembre por los técnicos en Historia del Arte de la citada Dirección General al que hemos tenido acceso es mucho más grave (se adjunta). Podemos decir, sin lugar a dudas, que se ha consumado un auténtico expolio del Monasterio, fundamentalmente en la Iglesia. Entre lo que se ha constatado ahora hay un total de 32 elementos que han desaparecido y en algunos casos tras ser literalmente arrancados, ocasionando daños evidentes en los cinco retablos de la Iglesia y además también al órgano, al que le falta toda la trompetería, siendo uno de los mejores órganos de la península, y de los pocos que quedan de estas características.
Todo ello al parecer, sin violentar ningún acceso, pues todo lo que falta ha debido ser retirado o sustraído en los dos o tres últimos años, en algunos casos con ayuda de andamios, sin signos evidentes de haber forzado puertas o ventanas. Nos sorprende que no se hayan tomado medidas antes, pese a nuestra denuncia de hace casi un año, e igualmente no tenemos constancia de cuáles han sido los requerimientos que en este caso se le han hecho a la empresa propietaria, ni tampoco en qué términos se ha procedido a cursar denuncia.
Desde el Grupo Municipal Socialista advertimos, ante estos hechos, una evidente dejación en sus competencias de la Dirección General de Bienes Culturales de la Consejería de Cultura, por falta de supervisión, dejación que se materializó desde que la Iglesia y Convento se declaró BIC en 2003, con la categoría de monumento, permitiendo que oficialmente las monjas se llevaran las dos campanas antes de abandonar el Convento, y al mismo tiempo consideramos que el propio equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento no ha estado a la altura de las circunstancias desde el primer momento.
Por tanto, este Grupo Municipal va a presentar denuncia ante el Juzgado de Caravaca, además de haberse personado en el expediente de la Dirección General de Bienes Culturales y de haber puesto este asunto en manos de la Ejecutiva Regional del PSOE y del diputado por la Comarca del Noroeste, Jesús Navarro, para que se lleve este asunto a la Asamblea Regional, como así nos han confirmado.
