En el pleno extraordinario celebrado hoy 12 de enero, los concejales socialistas han votado en contra de remunicipalizar el servicio de agua potable y de alcantarillado del municipio de Calasparra. La alcaldesa ha manifestado sentirse satisfecha y contenta con los servicios que AQUALIA está prestando en el municipio durante casi veinte años y, junto con su equipo de gobierno, apuestan por un servicio privatizado antes que por la gestión directa del agua potable.
La mayoría absoluta socialista también ha votado en contra de la formación de una mesa de trabajo compuesta por concejales de todos los grupos políticos para ir trabajando y anticipándose a la cercana finalización del convenio con la multinacional.
Asimismo, la alcaldesa socialista ha ocultado la mayor parte de la información solicitada por los concejales de la oposición, quienes han provocado la celebración del pleno extraordinario con sus firmas. Entre la documentación no entregada se encuentra la ubicación de tramos de tuberías y canalizaciones de "uralita" o internit que aún permanecen sin sustituir, con el peligro para la salud de las personas que puede suponer y tampoco ha entregado la documentación justificativa de las inversiones en infraestructuras que estipulase el ayuntamiento, que la concesionaria debería ejecutar y sufragar, según convenio, por importe de 6.437.076 €
La regidora local, Teresa García, a afeado a los concejales de la oposición el "tener la cara muy dura" por solicitar un pleno extraordinario con este motivo, en el cuál, la oposición solo pretende estudiar la mejor opción posible para Calasparra cara al próximo vencimiento del contrato suscrito con la mercantil Aqualia respecto a un servicio tan importante como es el agua de boca.
Además ha reconocido que el riego en la localidad de jardines públicos se realiza con agua potable de la red general de agua para consumo humano, haya sequía o no, aunque el ayuntamiento disponga de la concesión de agua denominada Pozo Esparteros, ubicado dentro del propio casco urbano.