Más de una semana de actividades están conmemorando en Calasparra el Día de Libro. Las citas arrancaban con una exposición de pintura dedicada a Miguel Hernández y concluirán el próximo viernes con el “Calasparra Poética”. El encuentro poético se recupera tras varios años de ausencia en el programa cultural de la villa y vuelve dispuesto a quedarse. Ginés Aniorte, Pascual García, Sorem Peñalver, Antonio López, o Pedro Antonio Martínez Robles serán algunos de los autores que se “encuentren” este viernes en la Casa de la Cultura. Entre medias hemos tenido presentaciones de libros, como la novela “Las piedras grises”, de Miguel García Rubio, todo un descubrimiento. O el libro de poesía “Las estrellas concéntricas” de Rosa Campos, que ha demostrado tener una gran sensibilidad, no sólo para la pintura. El V Certamen Literario “Humor en Tiempos Revueltos” volvió a despertar la afición por la escritura entre los calasparreños, dándoles, un año más, la posibilidad de expresar sus sentimientos y emociones. La velada resultó de lo más divertida con las peculiares historias que contaron los diferentes participantes.
Ya por la noche los alumnos y alumnas del I.E.S Emilio Pérez Piñero estrenaron la obra teatral “El Fantasma de la Ópera”, espectáculo que agrupo a un gran número de personas en el Auditorio Municipal. Además la obra que fue todo un éxito, destacó por el atractivo montaje y el sonido de las voces en directo de los actores.
Para concluir con el fin de semana, el domingo se realizó la actividad “La Biblioteca sale a la calle”, donde se pudieron ver varios stands dedicados a los libros, con la presencia de algunas librerías, junto a una muestra de libros publicados por el Ayuntamiento local. Por su parte, los miembros del Club de Lectura compartieron varios escritos de Miguel Delibes, mientras que otros ciudadanos, de forma espontánea, también recitaron algunos poemas. Además durante la jornada, los alumnos y alumnas de la Escuela de Música realizaron una exhibición que concluyó con la actuación de un grupo musical. Para el disfrute de los más pequeños, se organizaron diferentes talleres de dibujo y pintura y también de globoflexia, actividad que consiste en dar formas a los globos, y con la que los niños se lo pasaron en grande.