La maqueta, realizada por Antonio Mena Caparrós, permanecerá expuesta durante varios meses en la sala de proyecciones del museo.
Esta mañana se ha presentado en el museo arqueológico de Águilas, una maqueta que muestra el proceso de elaboración del esparto, un trabajo ligado al municipio desde su fundación, en el siglo XVIII, y que ha permanecido activo hasta mediados del siglo XX, llegando a suponer una de las principales fuentes de ingreso para sus habitantes.
El acto de presentación ha contado con la asistencia del concejal de Cultura y Patrimonio, Francisco Miguel Martínez, el director del museo arqueológico, Juan de Dios Hernández, y el autor de la maqueta, Antonio Mena Caparrós, entre otras autoridades municipales, así como varios invitados y aguileños que estuvieron vinculados a la producción del esparto en la localidad, como es el caso de Pedro Román Jiménez "El Mori", que junto a sus primos: Pedro, Bartolo, Diego y Ramón Román Gálvez, dedicaron una buena parte de sus vidas a este oficio.
Durante el acto, el concejal de Cultura y Patrimonio ha destacado la importancia que tuvo esta planta esteparia para la economía local, indicando que una muestra evidente son los cuantiosos cocedores de esparto que aún hoy día se pueden divisar en diferentes puntos de nuestro término municipal, un territorio conocido en época romana como "Campus Espartarius", por lo que Águilas merece tener un museo del esparto y ello está trabajando ya el Equipo de Gobierno Municipal.
Por su parte, Antonio Mena, que estuvo ligado a la industria del esparto desde los 7 a los 17 años de edad, ha señalado que ha dedicado un año a la confección de la maqueta, realizándola en su tiempo libre.
Mena ha querido matizar que, con ella, ha intentando reflejar todo el proceso de fabricación del esparto, desde su recogida en el campo al momento de hilarlo, pasando por el cocedor y su posterior secado, el picado en los mazos o su rastrillado para sacarle la fibra, hasta conseguir el producto final, que era utilizado por agricultores, pescadores y albañiles, dándole múltiples aplicaciones.
La maqueta permanecerá expuesta en la sala de proyecciones del museo arqueológico, durante varios meses, pudiéndola visitar en su horario habitual de apertura al público.